Raimundo Fitero
DE REOJO

Soria

El ministro Soria es una versión en tamaño XL de Aznar y según cómo le enfocan las cámaras, especialmente si está sentado, parece ser una aparición del propio guerrero del antifaz y las FAES. Desde luego, casi todas las decisiones que ha tomado su Ministerio parecen estar influenciadas por el mismo diablo, cártel, grupo de presión y pensando en su futuro tras las elecciones. El ministro Soria es de lo peor de esta legislatura, y este mérito es de un esfuerzo inhumano. Pero lo ha logrado, todo lo que ha tocado lo ha enmerdado más.

Este canario estaba a favor de las prospecciones de las petroleras en las aguas de sus preciosas islas. Ha sido el que ha pactado de una manera descarada con las eléctricas y hoy no hay nadie que entienda el recibo de la luz, pero de paso se ha cargado de modo criminal todo lo referente a las energías renovables, es decir aquellas que, curiosamente, no dependen del petróleo o del gas natural.

No hay muchas explicaciones, se trata a todas luces de favorecer a quienes le darán empleo en cuanto salga del Gobierno. No le ha importado nada, ni a su Jefe, hacer estas barbaridades que afectan al bienestar de todos, del mundo entero, y que arruina a los ciudadanos de manera silente.

También depende de Industria la televisión. La TDT. Ya se cargó nueve canales de la TDT para darle acogida a la telefonía 4G. Vale, aceptamos la mentira. Pero ahora se quiere cargar otros nueve canales, porque hubo algún despiste o corrupción administrativa en el Gobierno de Zapatero. Y de paso, aprieta los machos al duopolio para que les traten bien, y si pudieran conseguir cegar Cuatro y La Sexta, mejor, así sería todo un telediario franquista sin contradicciones pero en color. Ese es el objetivo final. Y poner publicidad en TVE. Cuanta menos competencia, mejor.