La información que ha trascendido acerca del Foro Mundial de Alcaldes, que se inicia el jueves en Alhondiga Bilbao, dibuja una cumbre a la que acudirán al parecer 54 delegaciones de ciudades junto a directivos de una docena de grandes empresas.
Al Botxo acudirán representantes de Moscú, Buenos Aires, Ciudad del Cabo, Singapur, Kinshasa, Madrid, Barcelona, Bangkok, El Cairo, Houston, Kigali, Riad o Tunez, que se sentarán al lado de directivos de CAF, BBVA, Iberdrola, Idom, Sener, Mondragon, Shell, IBM o Keppel, en la cuarta edición de este evento que cambia Singapur por Bilbo como sede. Parece difícil que participe el alcalde anfritrión, Iñaki Azkuna, que se recupera después de semanas en el hospital para tratar sus continuados problemas de salud.
A expensas de que mañana se den a conocer detalles más concretos del programa, Bildu ofreció ayer su visión del evento. Para la coalición soberanista, «la cumbre no busca afrontar los problemas de la ciudad, sino explorar vías de enriquecimiento para grandes empresas».
Su portavoz, Aitziber Ibaibarriaga, quiso dejar claro que se trata de una cumbre no oficial, «y por tanto, desligada de cualquier tipo de control democrático, cuya agenda se marca por una fundación privada».
«Que nadie piense que en esta cumbre de alcaldes van a trabajar políticas en pro del bienestar de la sociedad o similares. Nada más lejos de la realidad. Las prioridades de este foro son el negocio y la empresa privada», enfatizó la edil. Además, denunció que con este evento, al que solo acudirán a la recepción oficial que se ofrecerá en la casa consistorial, el Gobierno Azkuna pretende «enaltecer el falso mito de la buena gestión del Ayuntamiento, algo que es falso con una deuda millonaria».

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