Según ha anunciado el primer edil en el acto de inauguración de los reformados terrenos de juego de los campos municipales de Artxanda, «siempre dentro de la legalidad, el Consistorio buscará evitar la tramitación de la licencia».

En esta línea, Areso ha considerado que tal decisión, que también implica una modificación de la ordenanza de hostelería, no supondrá un delito de prevaricación, y en el caso de que hubiera que indemnizar a los promotores del centro, «sería más barato que destinar cuadrillas de policías municipales día sí y día también» a vigilar la zona.

Tras reconocer que «comparte la preocupación surgida en el barrio», el primer edil ha incidido en que no tiene duda de la profesionalidad de los hosteleros que apuestan por desarrollar el proyecto en lo que respecta a condiciones de seguridad o aislamiento acústico.

«El problema de verdad no está en la discoteca sino en el entorno», ha reconocido, para añadir que sería «muy difícil» que el Consistorio pudiera sancionar en un futuro con un posible cierre en el caso de que los problemas se generaran en el exterior del recinto.

«La decisión que hemos adoptado es que se trate de evitar esta licencia, siempre dentro de la ley y buscando los mecanismos», ha anunciado, para añadir que para ello se modificará el Plan General de Ordenación Urbana con el objetivo de que las discotecas solo se puedan ubicar en polígonos industriales.

En este sentido, ha aclarado que polígono industrial no es lo mismo que edificio industrial y ha remarcado que, aunque la decisión pueda parecer «muy restrictiva», en la actualidad «la juventud no está suficientemente concienciada» de que junto al derecho al esparcimiento también los vecinos tienen derecho al descanso.

Por ello, Areso ha reconocido que «es posible» que para el Pleno de enero de 2015 se pueda aprobar definitivamente la modificación, aunque «no podemos asegurar al ciento por ciento que no se abra la instalación porque el Ayuntamiento no infringe la ley».

Asimismo, ha manifestado que ante la decisión no cabría la posibilidad de que el Ayuntamiento cometiese un delito de prevaricación, otra cosa es que los promotores del recinto puedan tener derecho a algún tipo de indemnización.

«En cualquier caso, si se llegara a esta situación, eso es más barato que tener un montón de cuadrillas de policía municipal, día sí y día también, concentrados porque cada noche hay un jaleo», ha incidido.