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Katuki Saguyaki, nueva marca de Urmeneta tras su tormentosa salida de Kukuxumusu

Mikel Urmeneta, director creativo de Kukuxumusu, ha presentado una nueva marca tras una salida polémica de la empresa que creó. El artista, arropado por el resto de dibujantes que sacaron adelante a Kukuxumusu en 1989, lanza ahora Katuki Saguyaki con el peculiar estilo de siempre.

Presentación de Katuki Saguyaki, la nueva marca de Urmeneta. (Jagoba MANTEROLA / ARGAZKI PRESS)
Presentación de Katuki Saguyaki, la nueva marca de Urmeneta. (Jagoba MANTEROLA / ARGAZKI PRESS)

A inicios de noviembre, Mikel Urmeneta arrancó y tiró al suelo el ordenador de Ricardo Bermejo, el nuevo propietario de Kukuxumusu, que compró la marca cuando pasaba dificutades económicas a inicios de 2014. Bermejo es un publicista polémico, que creció gracias a su amistad con Enrique Goñi que le permitió quedarse en exclusiva con la publicidad de Caja Navarra, a la que facturó decenas de millones de euros, pese a tener varias polémicas por plagios. Días después Bermejo envió un burofax a Urmeneta en el que le comunicaba su destitución como director creativo. De hecho, el ambiente estaba enrarecido desde el principio, entre otras cosas, por el maltrato al euskara que, según ha confesado Urmeneta, se notó desde el primer día.

Katuki Saguyaki nace con el mismo estilo de la primera Kukuxumusu. Junto con el logo y el nombre de la marca, Urmeneta ha presentado la primera camiseta que tiene temática Sanferminera. El nuevo logotipo parece adelantar una guerra por la propiedad intelectual, pues son dos ratones degollando a un gato al que se van a zampar. Urmeneta lo tiene claro: «Nosotros seguimos pudiendo hacer lo que hacíamos, a nadie se le puede decir que no pinte tal y como pinta. Lo que no está claro es que ellos puedan seguir hacieno lo que hacían».

Urmeneta sigue teniendo un tercio de las acciones de Kukuxumusu, pero asegura estar convencido de que «ya no valen nada». El creativo ha presentado la nueva marca con los dibujantes que, en su día, hicieron grande a Kukuxumusu: Txema Sanz, Belatz, Asisko Urmeneta y MKO.

«El nuevo socio se compró un juguete nuevo sin leer las instrucciones, mostrando una terrible obsesión por usar solo las suyas e ignorando la historia y la filosofía hasta entonces. El cambio de logotipo, tipografía, la manipulación de los dibujos y el maltrato al euskera fueron una declaración de intenciones», ha explicado Urmeneta, que ha concretado que en junio le habían comunicado su despido, aunque no se hizo efectivo hasta finales de año. En teoría, debía aguantar hasta el 31 de diciembre pero, claro, lo de arrancarle el ordendor al nuevo dueño acabó acelerando un poco su salida.