Los defensores de la antigua dirección de Podemos en la CAV que encabezaba Roberto Uriarte, no han dejado pasar la oportunidad de la pugna interna entre Pablo Iglesias e Iñigo Errejón para hacer su particular ajuste de cuentas con la nueva ejecutiva autonómica que lidera Nagua Alba. El detonante han sido unas declaraciones del diputado y “número 2” Eduardo Maura en las que criticó el cese del anterior secretario de Organización, Sergio Pascual. El instrumento elegido, una declaración firmada por 78 cargos orgánicos e institucionales de Podemos en la CAV y remitida a los medios de comunicación desde la cuenta de correo de la corriente Kaliangora.

Entre los 78 firmantes del documentos aparece Pilar Garrido, que fue la candidata a la secretaría general de la formación en la CAV de la corriente Kaliangora, impulsada por el sector del anterior secretario autonómico de Podemos, Roberto Uriarte; están también cuatro de los cinco senadores que tiene la formación en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, Ángel Mesón, Josetxo Arrieta, Kontxi Palencia y Miren Gorrotxategi, además de junteros de los tres territorios y concejales del partido en Irun y Basauri, junto a una variedad de cargos orgánicos municipales y provinciales. El documento está abierto a nuevas adhesiones.

El escrito pretende, según sus remitentes, criticar la utilización que miembros de la nueva dirección autonómica han hecho de cauces internos y públicos para cuestionar la decisión de Pablo Iglesias, secretario general de Podemos, de reemplazar al anterior titular de la Secretaría de Organización.

Decisión estatutaria

El documento comienza describiendo que «nuestro Secretario General, Pablo Iglesias, asumió el pasado día 16 la responsabilidad de cesar a su Secretario de Organización, Sergio Pascual». Y recuerdan que «además de citar las razones que requerían tomar tal decisión, dio explicaciones precisas tanto a nivel interno como público» y propuso su relevo por «el compañero Pablo Echenique».

Los firmantes defienden que «ese relevo previsto estatutariamente no debería tener ninguna otra repercusión». Sin embargo, denuncian que «al cabo de 10 días se alzaron voces desde Podemos Euskadi, a través de la prensa, cuestionando el cese de Sergio Pascual y en consecuencia la decisión de Pablo Iglesias».

Fue el diputado en el Congreso y secretario de Cultura y Formación de Podemos de la CAV, Eduardo Maura, quien la pasada semana criticó las formas de Pablo Iglesias en ese cese y consideró «absurdo» buscar en Sergio Pascual «un único culpable que pudiera ser responsable de todos esos problemas».

Rectificación pública

Los 78 firmantes del texto consideran «grave» este comportamiento y por ello muestran su respaldo pleno a la decisión de Pablo Iglesias, al tiempo que reprueban «la utilización de cargos de representación interna e institucional de Podemos Euskadi para cuestionar públicamente decisiones que son competencia directa de la Secretaría General de Podemos».

Advierten que las posiciones mostradas por Maura son «posicionamientos personales, individuales, adoptados sin conocimiento ni consentimiento del Consejo Ciudadano de Euskadi, de las secretarías municipales, de los círculos y de los cargos electos de nuestra comunidad».

El escrito acaba con la petición de «una rectificación pública dirigida a los Círculos de Podemos Euskadi y a los medios que se han hecho eco de las declaraciones descalificatorias».

Guerra interna

A primera vista, las declaraciones de Eduardo Maura no parecen susceptibles de semejante censura pública, sin embargo detrás se encuentran las propias guerras internas de Podemos de la CAV. La actual Ejecutiva dirigida por Nagua Alba estuvo apoyada por Iñigo Errejón y por el cesado Sergio Pascual, a quienes el anterior Consejo Ciudadano dirigido por Roberto Uriarte acusó de ser los causantes de sus dimisiones.

Alba ganó las elecciones internas a Kaliangora por un estrecho margen y con peticiones de una auditoría de los resultados.

El PSOE anuncia reuniones «a tres» la próxima semana

El portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, anunció que la semana que viene, probablemente el lunes, comenzarán las reuniones negociadoras con Ciudadanos y Podemos, que serán «a tres» y en las que no descarta que participe Pedro Sánchez, si es necesario en algún momento. Hernando se mostró convencido de que en estas reuniones los equipos negociadores van a poder «superar las dificultades» y llegar a acuerdos, aunque el proceso, admitió, «no va a ser fácil».

Antes de estas declaraciones, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, había avisado directamente al PSOE de que si no «cede» y acepta explorar la posibilidad de formar un gobierno de coalición progresista, «no quedará más remedio que ir a elecciones», un escenario al que la formación morada no teme pero que no desea, según aseguró. Iglesias insistió en que «queremos explorar la vía de ese gobierno a la valenciana pero si no quiere, qué le vamos a hacer».

Por su parte, Ciudadanos, sigue sin aceptar formar un gobierno con Podemos, aunque se abre a posibles acuerdos puntuales, al igual que con el PP. Albert Rivera declaró que «lo menos malo que puede tener España» ahora es «un Gobierno del PSOE y Ciudadanos con una agenda reformista, que tienda puentes con Podemos para temas sociales o asuntos de regeneración y con el PP para temas económicos o asuntos de Estado, y que pueda desatascar esta situación». GARA