Arantxa MANTEROLA
BAIONA

Bizi pide explicaciones a Total sobre sus intenciones de extraer petróleo

Los organizadores de StopMCEDD, la anticumbre del congreso de las multinacionales petrolíferas celebrado en Pau, revelaron ayer que se reunieron con responsables de Total hace unos días. En el encuentro la empresa se comprometió a no explotar ciertos yacimientos, pero por las noticias que han tenido sobre unos contratos, creen que miente.

Varias organizaciones de defensa del medioambiente y contra el cambio climático, entre ellas ANV-COP21, Nation Océan, 350.org, Attac, Surfrider Foundation Europe y la vasca Bizi!, hicieron público ayer, en Pau, que se reunieron con directivos de Total en vísperas del congreso MCEDD que ha tenido lugar estos días en esa localidad.

En el encuentro celebrado el 31 de marzo, Jérôme Schmitt, vicepresidente ejecutivo de desarrollo sostenible de la multinacional, les afirmó, según declararon, que «son conscientes de la necesidad de no explotar todo el petróleo del planeta para poder limitar el calentamiento atmosférico por debajo de los +2ºC», compromiso adoptado en diciembre pasado por los países participantes en la COP21 de París. En concreto, Schmitt les habría manifestado que «hay yacimientos que no explotaremos debido a la situación climática, particularmente aquellos que tienen un impacto ecológico o costes económicos importantes». Entre los yacimientos afectados, destacó el petróleo del Ártico.

Sin embargo, los organizadores de la anticumbre del congreso de empresas petrolíferas que finaliza hoy en la capital bearnesa afirmaron que han tenido conocimiento «por medio de una fuente extremadamente fiable, de que Total, a través de su filial Totsa, ha firmado a principios de 2016 un contrato a largo plazo con la controvertida compañía Gazprom».

Sería un «escándalo»

Así, en virtud del citado acuerdo, «Total compraría, vía Totsa, el petróleo extraído de la plataforma Prirazlomnaya, situada en el subsuelo ártico, en el mar de Petchora».

Ante esta noticia, los organizadores de la movilización de Pau han exigido explicaciones a la dirección de la multinacional petrolífera. «Si esto se confirma, se trataría de un verdadero escándalo y entraría en contradicción con numerosas declaraciones y compromisos tanto públicos como privados adoptados por Total sobre este asunto tan sensible», añadieron en su comparecencia.

Hace poco más de un año, en una entrevista en la revista Sustain, especializada en el desarrollo sostenible, el propio Schmitt afirmaba el «compromiso de Total con una energía mejor» y que «la responsabilidad social de la empresa, incluído el cambio climático, está integrada en la estrategia del grupo».

Algo que parece contradecirse con lo que dicen haber descubierto los activistas ecologistas que denuncian la celebración de las jornadas en las que las grandes compañías de explotación de petróleo y gas offshore, como Shell, BP, o la propia Total, estudian el modo de desarrollar los «sondeos submarinos profundos y ultraprofundos con el fin de explotar, aún más, las reservas de petróleo».

 

Acciones llamativas para denunciar los objetivos de las petrolíferas

Desde el lunes y hasta hoy, último día del congreso, varios cientos de militantes han intentado torpedearlo por medio de diversas acciones no violentas. En la madrugada del martes al miércoles, por ejemplo, entraron en varios hoteles, donde se hospedaban los participantes, con bocinas y sirenas para cortarles el sueño y se encadenaron a la verja de uno de ellos para impedir que salieran.

Hoy, para la clausura, realizarán una «tumbada» gigante ante el Palacio Beaumont, sede del congreso.A.M.