La victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses ha provocado una ola de reacciones y felicitaciones. Una de las primeras en hablar ha sido la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, que ha subrayado que las relaciones entre EEUU y la Unión Europea son «más profundas» que cualquier cambio político y ha aseguró que los Veintiocho seguirán trabajando con EEUU.

Por el contrario, el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, ha señalado que para la UE «será difícil» trabajar con Trump. «Será más duro que con otras administraciones estadounidenses pero su victoria es el resultado de un voto democrático y hay que respetarlo», ha añadido. Se ha mostrado «sorprendido y decepcionado» y ha apuntado que que la victoria del republicano responde a «una ola de protestas que comenzó con el Brexit».

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, han trasladado sus «sinceras felicitaciones» a Trump por su victoria y le han subrayado que «los europeos confían en que EEUU, cuyos ideales democráticos siempre han sido un faro de esperanza en todo el mundo, continúe invirtiendo en sus relaciones con sus amigos y aliados».

Los presidentes italiano y español, Mateo Renzi y Mariano Rajoy también han felicitado mediante las redes sociales al nuevo inquilino de la Casa Blanca. La primera ministra británica, Theresa May, ha señalado a Trump que bajo su mandato espera que las islas sigan siendo «un aliado fuerte» en todo tipo de ámbitos.

La canciller alemana, Angela Merkel, ha ofrecido su «estrecha colaboración» al futuro presidente de EEUU sobre la «base de los valores compartidos de democracia, libertad y respeto al otro», y ha subrayado que la relación transatlántica es un puntal en la política exterior de su país. «Con ningún otro país fuera de la UE tenemos una relación tan profunda como con EEUU».

Por el contrario, el presidente francés, François Hollande, ha apuntado que el triunfo de Trump en las elecciones estadounidenses «abre un periodo de incertidumbre», ante el que su Estado debe mostrarse «más fuerte que nunca». En su primera declaración tras esos comicios, ha señalado que hay que abordar «con lucidez» esta nueva etapa.

El primer ministro turco, Binali Yildirim, ha aprovechado la coyuntura para demandar la extradición del clérigo islamista Fethullah Gülen, al que acusa de organizar el fallido golpe de Estado del pasado julio.

Más positivo se ha mostrado el presidente ruso, Vladimir Putin, quien ha expresado su esperanza de poder trabajar conjuntamente «para sacar las relaciones ruso-estadounidenses del estado de crisis», así como para resolver problemas de actualidad de la agenda internacional y «buscar respuestas a los retos de la seguridad global».

El secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin, ha felicitado a Donald Trump y le ha deseado un gobierno «fructífero», pese a que el Papa llegó a sugerir que Trump «no era cristiano» por su posición sobre la migración, aunque un portavoz negó posteriormente que hubiese sido un ataque personal. Parolin ha evitado entrar en esta polémica y ha abogado por «esperar a ver cómo se mueve el presidente» antes de valorar sus medidas. 

Otra de las reacciones más esperadas ha llegado desde México. El presidente Enrique Peña Nieto ha abogado por «trabajar juntos». En una serie de mensajes consecutivos mediante Twitter, el gobernante ha recordado que «México y EEUU son amigos, socios y aliados que deben seguir colaborando por la competitividad y el desarrollo de América del Norte».

Durante la campaña electoral estadounidense el republicano calificó de «violadores» y «narcotraficantes» a los mexicanos, amenazó con erigir un muro fronterizo en la frontera común y con exigir a México que pague su construcción. También anunció la deportación de millones de inmigrantes sin papeles procedentes de ese país y el bloqueo de las remesas que estos últimos envían a sus familiares desde EEUU.

Netanyahu: «Trump es un verdadero amigo de Israel»

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha calificado a Trump de «verdadero amigo del Estado de Israel». «El lazo de hierro entre los EEUU e Israel está fundado en valores compartidos, apuntalados por intereses comunes y conducido por un destino compartido. Confío que el presidente electo Trump y yo continuemos fortaleciendo la alianza única entre nuestros dos países y la llevemos a niveles incluso mayores», afirma en una nota.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, también ha felicitado al republicano Donald Trump por su victoria y ha destacado la importancia del liderazgo de EEUU ante «los nuevos retos para la seguridad» en el mundo.

El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha hecho un llamamiento para que se respeten los principios contemplados en la Carta de Naciones Unidas. Ban ha asegurado que «merece la pena recordar y reafirmar la unidad en la diversidad de EEUU como una de sus grandes fortalezas». «Emplazo a todos los americanos a permanecer fieles a ese espíritu», ha añadido.

«Esperamos que el nuevo Gobierno de EEUU pueda trabajar con China en una cooperación que beneficie a los pueblos» de ambos países, ha afirmado el Ministerio chino de Exteriores. En la misma línez, el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, ha expresado su voluntad de «trabajar mano a mano», con el objetivo de mantener a Washington como «aliado inquebrantable» y «asegurar la paz y la estabilidad».

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Mohamad Javad Zarif, ha instado al mandatario estadounidense a respetar el acuerdo nuclear firmado por Teherán con seis grandes potencias internacionales, criticado por Trump durante la campaña electoral.