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BILBO

Ikastolen Elkartea pide más inversión y un plan de inmersión para acabar con la segregación

Ikastolen Elkartea considera insuficiente el dinero destinado a garantizar la integración del alumnado extranjero en el sistema educativo de la CAV, una misión en la que Lakua ha invertido 1,6 millones de euros en 2018.

Comparecencia de Ikastolen Elkartea en Bilbo. (Monika DEL VALLE/FOKU)
Comparecencia de Ikastolen Elkartea en Bilbo. (Monika DEL VALLE/FOKU)

«En nuestra opinión los recursos que destina en este ámbito para el conjunto del sistema educativo tendría que multiplicarse. Calculamos unos 20 millones para la red concertada», han manifestado los responsables de Ikastolen Elkartea, que han presentado en Bilbo un dossier en el que se recoge una batería de medidas que tiene por objeto acabar con la segregación escolar. 

Entre las mismas, figura la necesidad de implantar el modelo de inmersión lingüística, ya que «a la hora de integrar en nuestra sociedad al alumnado de origen extranjero, el sistema de modelos lingüísticos se ha convertido en un mecanismo para apartarlos». «Es por ello que para hacer frente a la segregación consideramos imprescindible superar el actual sistema de modelos lingüísticos», han subrayado. 

La red de cooperativas reconoce que ve «acertada» la creación de oficinas de matriculación locales, «si bien a la hora de determinar qué modelo de oficinas de matriculación nos parece más adecuado optamos por el anglosajón: oficinas independientes que publiquen indicadores objetivos sobre el funcionamiento del centro, como informes del personal y/o evaluaciones externas». 

Becas y ayudas

En cuanto a las cuotas, que impiden que muchas familias puedan matricular a sus hijos e hijas en colegios concertados, Ikastolen Elkartea destaca que, «mientras la administración no cumpla con su compromiso, con el compromiso que adquiere al concertar los centros educativos, las ikastolas seguiremos manteniendo las becas y ayudas que tenemos para el alumnado con necesidades económicas. Esto es, las familias que no puedan abonar las cuotas seguirán en las ikastolas gracias a las solidaridad del resto de las familias», apunta antes de insistir en que «no puede ser, ni parecer, un sistema que esté fundamentado en la caridad». 

A su parecer, el problema generado por la segregación escolar «no hace sino confirmar la necesidad de una ley que regule el conjunto del sistema».