Joseba ITURRIA

Wout van Aert gana la quinta etapa y Alaphilippe pierde el liderato

Wout van Aert (Jumbo) ha ganado la quinta etapa del Tour al imponerse a Cees Bol, Sam Bennett y Peter Sagan en un sprint de fuerza en ligero ascenso. Todos los favoritos han llegado juntos, pero Julian Alaphillippe ha perdido el liderato al ser sancionado con veinte segundos por coger un bidón en los últimos 20 kilómetros. Adam Yates es el nuevo líder.

Wout Van Aert se ha impuesto a los sprinters en el final de Privas. (Anne Christine POUJOULAT/AFP)
Wout Van Aert se ha impuesto a los sprinters en el final de Privas. (Anne Christine POUJOULAT/AFP)

Wout van Aert ha dado la segunda victoria seguida al Lotto Jumbo y ha confirmado que es uno de los corredores más fuertes del pelotón al imponerse en la quinta etapa del Tour entre Gap y Privas, de 183 kilómetros, después de hacer la selección el día anterior en la subida final de Orcières-Merlette, al marcar el ritmo hasta que faltaban 1.300 metros.

El tres veces campeón del mundo de ciclocross confirma su nivel excepcional en su segunda temporada en la que ha priorizado la carretera. Este año ya había ganado también Strade Bianche, Milán San Remo, una etapa en Dauphiné y el campeonato belga de contrarreloj porque su fuerza la exprime en todos los terrenos. Es capaz de quedarse con los quince mejores escaladores y además sabe moverse en el pelotón y ha cogido la rueda buena de Cees Bol, muy bien ayudado por el equipo Sunweb, para superarlo en el sprint.

La otra nota destacada de la jornada la ha protagpnizado Julian Alaphilippe al ser sancionado por los jueces del Tour con 20 segundos por avituallamiento indebido al recoger un bidón en los últimos veinte kilómetros, por lo que ha perdido el maillot amarillo en favor del inglés Adam Yates, que estaba a cuatro segundos.

«Son cosas que pasan. Es una decisión oficial. No puedo hacer nada. Era una etapa muy larga y aburrida, con un final muy nervioso. Tenía que estar concentrado para mantener el maillot y tratar de ganar con Sam Bennett en el sprint. Mañana me volveré a poner en pie y trataré de recuperarlo», ha señalado Alaphilippe tras perder el amarillo.

También ha habido cambio en el maillot verde porque en el sprint intermedio Sam Bennett se lo ha arrebatado a Peter Sagan y además ha conseguido sumar más puntos en la llegada al lograr un tercer puesto, por un cuarto del eslovaco. Cosnefroy no ha tenido rival para disputar los dos puntos de la montaña que estaban en juego en los últimos kilómetros.

Etapa sin escapada

La etapa no ha tenido de manera sorprendente ninguna escapada porque, curiosamente, solo la han buscado dos corredores de los equipos de los sprinters, Kasper Asgreen y Thomas De Gendt en los kilómetros iniciales para no trabajar en el pelotón para atraparla. Tras ser neutralizado su intento, el flamenco del equipo de Caleb Ewan lo ha vuelto a intentar, pero nadie ha querido irse con él y ha desistido. No ha habido ningún movimiento más.

Tampoco ha habido abanicos en los últimos kilómetros, en los que los equipos de los hombres fuertes de la general han estado atentos en cabeza y eso ha provocado que se acabara a una velocidad alta, pero sin llegarse a romper el pelotón. Ha sido Ineos el que lo ha intentado por dos veces, la primera con Jonathan Castroviejo, pero un pinchazo de Carapaz les ha obligado a parar, y la segunda aceleración en los últimos diez kilómetros tampoco ha roto el grupo.

Wout Poels, que debía ser el mejor apoyo de Mikel Landa en las etapas de montaña, ha sido el primero en quedarse al acelerarse la marcha al pagar que corre con dos costillas fracturadas desde su caída del primer día, en el que el Bahrain perdió además a Rafa Valls. Se ha llevado el premio a la combatividad al no merecerla ningún corredor.

Segundo final en alto

El Tour vivirá mañana un final más exigente que el del martes en Orcières-Merlette porque en los últimos kilómetros se empalma la subida del col de la Lusette, 11,7 kilómetros al 7,3%, que se corona a 13,5 de meta y tiene bonificación, con la ascensión final al Observatorio Meteorológico del Mont Aigoual (8,3 kms. al 4 %). La última subida no tiene una pendiente importante y de querer un equipo moverse deberá hacerlo en el col de la Lusette, que tiene zonas con promedios de mucha entidad.