Mañana de muchos nervios con el inicio del curso en Infantil, Primaria y ESO en la CAV. Los centros han tenido una semana para ultimar detalles pero muchas son las dudas que aún tendrán que despejarse en las próximas semanas. Preocupa la evolución de la pandemia y cómo afectará al desarrollo de las clases presenciales.

A las 9.00, en el acceso de Intxixu Ikastola, en el barrio bilbaino de San Inazio, el profesorado preparaba con pegatinas de distintos colores las hileras donde luego los y las alumnas han formado antes de acceder después de constatar que no tenían fiebre.

No había acabado de pasar una barredora después de un camión de baldeo y ya había algunos chavales, acompañados de sus progenitores, esperando a participar en la presentación. Intxixu comparte edificio con el instituto de San Inazio, por lo que han solapado horarios en esta jornada de arranque, como en otros centros; algunos lo harán mañana. Al contrario que otros años, las familias han tenido que observar desde el otro lado de la valla cómo entraban a clase.

Tranquilidad en Deustuko Ikastola y el colegio público Deusto, donde pequeños grupos de madres conversaban acerca de protocolos y otras novedades que presenta este curso marcado por la pandemia. Más bullicio, sin duda, el acceso del alumnado a las escuelas de Mujika, en el Casco Viejo, donde profesores tomaban la temperatura a los txikis en plena calle Santa María ante la atenta mirada de los mayores.

No muy lejos, en Atxuri, la jornada de presentación en el colegio público Maestro García Rivero ha estado marcada por las protestas de la Ampa. Tres pancartas mostraban las reivindicaciones básicas que les han llevado a la movilización, a la que seguirá el miércoles una asamblea para determinar nuevos pasos. «Gobierno Vasco, Ayuntamiento: Irresponsables!! Ni contrataciones, ni espacios», «La dejación del Gobierno Vasco nos deja sin comedor» y «Gure segurtasunerako baliabideak behar ditugu» eran los mensajes que trataban de transmitir.

Reivindicaciones históricas

Los problemas de espacio en la centenaria escuela de Atxuri no son nuevos, pero los protocolos ante el covid-19 les ha dejado sin servicio de comedor. La noticia la conocieron el viernes pasado, por lo que el malestar entre las familias es grande. «De un día a otro, muchos nos hemos encontrado con la sorpresa de que no podremos dejar a nuestros hijos e hijas a comer, con los problemas que ellos nos genera», han explicado.

Tachan de «irresponsable» la posición de Educación cuando había asegurado que tenían un protocolo bien pautado. «80 niñas y niños de dfiferentes cursos comiendo juntos en un espacio minúsculo, eso es su plan para hacer frente a la pandemia», han criticado.

Además, hoy han echado un falta una patrulla de la Policía Municipal para regular el tráfico en los aledaños a la escuela, por donde transitan diferentes autobuses públicos y el tranvía. «¿Tanto cuesta que venga una patrulla con el peligro que hay aquí en la hora de entrada y salida de clase?», han interpelado a los responsables del Consistorio.

La Ampa reivindica que una parte de la cercana estación, sin servicio ferroviario desde hace un año, se convierta en un espacio «polivalente» para atender las necesidades del barrio. Lamentan que los planes del Gobierno autonómico no contemplen dotar de más espacio a la escuela y critican que Lakua, al igual que el Consistorio bilbaino, no haya atendido su demanda histórica para que se resuelvan las grandes carencias que tiene este histórico equipamiento educativo.

«Uno le pasa la pelota al otro y aquí nadie resuelve los problemas. Lo del coronavirus, con el cierre del comedor, ha sido la gota que ha colmado el vaso», han explicado.

El miércoles, a las 19.00, han convocado una asamblea abierta en el parque de Atxuri en la que se analizará la situación. Acusan al Gobierno de Gasteiz de «no garantizar la salud» de sus hijas e hijos. No descartan nuevas movilizaciones.