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La Seguridad Social reconoce el accidente de trabajo a una camarera que medió en una pelea

El shock y la crisis de pánico sufridos por una trabajadora de una casa de apuestas de Bilbo que medió en una pelea han sido reconocidos como accidente de trabajo por la Seguridad Social.

La Seguridad Social ha reconocido como accidente de trabajo el caso de una trabajadora de una casa de apuestas de Bilbo. (@CCOOeuskadi)
La Seguridad Social ha reconocido como accidente de trabajo el caso de una trabajadora de una casa de apuestas de Bilbo. (@CCOOeuskadi)

La Seguridad Social ha reconocido como accidente de trabajo el caso de una trabajadora de una casa de apuestas de Bilbo que sufrió una crisis de ansiedad al intervenir en una pelea entre clientes, según ha informado CCOO.

La trabajadora pertenece a Comercial de Desarrollos Electrónicos SA, empresa que gestiona el salón de juegos Toka Joko Aretoa, situado en el barrio de Rekalde en la cpaital bizkaitarra, donde la empleada desempeña su tarea como camarera.

El estado de ansiedad por el que la trabajadora ha estado de baja médica se desencadenó debido a la crisis de pánico que sufrió el 5 de setiembre de 2020, cuando varias personas accedieron al local con intención de agredir físicamente a un cliente que en ese momento se encontraba dentro.

Se desencadenó una pelea y la trabajadora, que era en aquel momento la única empleada en el local, salió de la barra para intentar mediar ante las personas agresoras, resultando también agredida de forma verbal por estas personas.

El shock y la crisis de pánico sufridos por la trabajadora hizo que fuese necesario solicitar la presencia de una ambulancia y que la trabajadora tuviese que acudir al servicio de urgencias de Osakidetza.

CCOO ha denunciado la actitud de Mutua Universal, entidad responsable de la cobertura de las contingencias profesionales de la empresa. La trabajadora acudió a esta mutua, que no reconoció la situación como accidente de trabajo y derivó a la camarera a Osakidetza alegando que la dolencia sufrida nada tenía que ver con el trabajo, lo que motivó la denuncia de CCOO ante la Seguridad Social.