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Oiarzabal: «En Txagorritxu me he comido el oxígeno que no he consumido en ochomiles»

El montañero Juanito Oiarzabal está en casa tras haber pasado diez días hospitalizado a consecuencia del covid-19 en Txagorritxu, donde ha requerido de oxígeno artificial para superar una neumonía «bastante severa».

Juanito Oiarzabal, ya en casa.
Juanito Oiarzabal, ya en casa.

Juanito Oiarzabal acaba de regresar a su casa tras pasar diez días ingresado en el Hospital de Txagorritxu, donde se ha repuesto de una nuemonía «severa» provocada por el covid-19.

«Todo el oxígeno que no he consumido durante las expediciones me lo he comido ahora», ha explicado el montañero en declaraciones al programa de ETB-2 En Jake, donde ha explicado que todo comenzó hace veinte días, cuando fue a realizar un preoperatorio.

Ha indicado que todo empezó un sábado en que «me fui al monte y ya me empecé a encontrar un poco mal». Desde ahí, «toda esa semana, del sábado al viernes, estuve en casa que me moría, sin mucha fiebre con un malestar generalizado». 

Según ha indicado, «fue una semana que estuve malísimamente mal, hasta que el viernes llame de urgencia a la ambulancia y me llevaron a Txagorritxu, donde empezaron a hacerme las pruebas pertinentes».

Gracias las misma comprobaron que padecía una neumonía, agravada por los antecedentes de Oiarzabal, que hace cuatro años sufrió una embolia pulmonar. «Soy un paciente de un cierto riesgo y tuvieron que andar con mucho cuidado», ha añadido.

«Al principio no me pusieron el famoso respirador, pero sí otro intermedio que actúa parecido», ha manifestado el montañero, que estuvo así tres días, hasta que «realmente se empezaron a purificar mis pulmones». Le han dicho que está perfectamente curado.

Oiarzabal ha agradecido el trabajo de los facultativos, que le han tratado «como si fuera el primer ministro». Y ha anunciado que tiene previsto viajar al campo base del Everest para continuar el proyecto documental con el que se quiere despidir de los ochomiles, a los que siempre ha ascendido sin oxígeno artificial, el mismo que ahora le ha ayudado a superar la enfermedad. No ha querido cerrar la entrevista sin alertar de que el covid-19 es muy serio. Lo ha probado en carne propia.