Arnaitz Gorriti

Saski Baskonia creará en 2022 una escuela de formación en Georgia

La colaboración del club con el ente federativo data de 2014 y este nuevo convenio se prolongará por cinco años para para continuar con su objetivo de «formación y profesionalización de las estructuras deportivas en este país a través de la Fundación 5+11».

La presencia de Tornike Shengelia en el Baskonia facilitó mucho las relaciones entre el club gasteiztarra y la Federación de Georgia. (Raúl BOGAJO / FOKU)
La presencia de Tornike Shengelia en el Baskonia facilitó mucho las relaciones entre el club gasteiztarra y la Federación de Georgia. (Raúl BOGAJO / FOKU)

Saski Baskonia creará una escuela de formación en Georgia en 2022, iniciativa incluida en el nuevo convenio de colaboración que se prorrogará entre el club gasteiztarra y la Federación del país del Cáucaso.

El primer acercamiento entre la entidad baskonista y dicha federación comenzó en 2014 y ahora se prolongará durante cinco años más para continuar con su objetivo de formación y profesionalización de las estructuras deportivas en este país a través de la Fundación 5+11.

Este acuerdo servirá para colaborar en la formación de jóvenes talentos y de entrenadores, la colaboración en la formación de dirigentes deportivos y en el desarrollo de un plan estratégico para los próximos cinco años que redunde en elevar el nivel deportivo de la selección georgiana.

Hasta el momento se han puesto en marcha diferentes iniciativas y se han asentado los campus de entrenamiento de cada verano, dirigidos a los jugadores más jóvenes.

La escuela seguirá la metodología Baskonia y «fomentará entre los niños y niñas georgianos hábitos de vida saludables a través de acciones vinculadas a la práctica del baloncesto, transmitiendo valores positivos tales como vida sana, deportividad, esfuerzo, superación y trabajo en equipo», ha señalado el propio Saski Baskonia en una nota de prensa.

Antecedentes muy lejanos

Aunque parezca mentira, la relación del Baskonia con Georgia data de los años 70 del Siglo XX. La primera toma de contacto entre la entidad alavesa y las autoridades de este país fue en 1977. A través de Manuel de Aranegui –presidente de la diputación Foral alavesa entre 1957 y 1966–, el Baskonia fue invitado a jugar en Tbilisi.

Entre Moscú y Tbilisi estudió los rasgos comunes entre la «Iberia caucásica» y el supuesto origen caucásico del pueblo vasco, idioma incluido.

Gracias a esta investigación, Manuel de Aranegui fue distinguido con la medalla Ivane Javakhishvili que otorga la Universidad Estatal de Tbilisi. Fue el historiador y periodista deportivo Alexander Kiknadze quien cursó la invitación al Baskonia para disputar una serie de partidos en territorio soviético.

Dada la complejidad que suponía aceptar esta invitación, la respuesta del club presidido por José Luis Sánchez Erauskin –el mítico «Santxon»– no tardó en producirse.Con todo, pese el interés mostrado por ambas partes finalmente no prosperó la visita gasteiztarra a Tbilisi.

Luces y sombras

El salto en el tiempo lleva a Saski Baskonia, ya convertido en todo un referente a nivel continental dentro del baloncesto, hasta 2014 cuando, después de que años atrás consigue el fichaje de Tornike Shengelia –el padre de «Toko», Kakha Shengelia, era el vice`residente federativo por aquellas fechas–, devuelva otra vez su mirada hacia Georgia, ya estado independiente tras el colapso de la Unión Soviética, para firmar un acuerdo de colaboración. El club gasteiztarra se comprometía a formar a los jóvenes valores georgianos a cambio de una serie de contraprestaciones económicas hasta 2019.

Las condiciones de aquel convenio suponían que entre 2015 y 2019, la Federación abona al Baskonia 300.000 euros anuales hasta un total de 1,5 millones. A cambio, el club gasteiztarra entrenaría a jóvenes jugadores georgianos.

La Federación, además, debe invertir 200.000 euros anuales (un millón en total) para ejecutar un programa de capacitación en Georgia. Parte del dinero cubre vuelos de especialistas desde Gasteiz para desarrollar un campus de baloncesto para jugadores jóvenes seleccionados por la Federación de Baloncesto de Georgia.

Si alguno de los jugadores georgianos firma contratos profesionales hasta 2024, la Federación de Georgia y el Baskonia se repartirán el traspaso al 50%.

Asimismo, el Baskonia elabora una lista de jugadores jóvenes no georgianos que militan en el club gasteoztarra. Si alguno de ellos firma un contrato profesional y hay un traspaso antes de 2024, Georgia recibirá el 30% de ese traspaso.

Si la Federación no hubiera recuperado en 2024 el millón y medio de euros invertido en el desarrollo de sus jugadores, el Baskonia reembolsaría la diferencia.

Durante ese período, cerca de una decena de jóvenes entre los 13 y los 20 años pasaron por la cantera baskonista, sin que hubiera por el momento destacables resultados, por lo que la idea del reotrno económico en caso de volar a la NBA se convertía en humo.

Asimismo, la OCCRP –un proyecto de investigación sobre el crimen organizado y la corrupción, que publica en medios locales georgianos pero publica también en su web en inglés y ruso– se hacía eco en el año 2018 de que la Federación de Georgia había desembolsado cerca de 2,5 millones de euros sin apenas haber obtenido contraprestaciones por parte del Baskonia.

La fiscalía de Georgia investigó el contrato como «poco realista» entre su federación y Baskonia por presunta malversación, y hasta dos miembros de la Federación georgiana abandonaron sus cargos en protesta por el citado acuerdo con el Baskonia.

Aunque se hablara de penas de entre 7 y 11 años de prisión, el asunto fue silenciándose de a poco hasta que Saski Baskonia y la Federación de Georgia han vuelto a la carga, aunque en este caso parece que la formación de los futuros jugadores se va a llevar a cabo en territorio del Cáucaso los próximos cinco años.