La vieja guardia consuela a Estados Unidos

Los goles de Rapinoe y Lloyd dan el bronce a la tetracampeona ante una Australia que ha concedido demasiado en defensa (2-4).

Lloyd celebra su segundo gol, con el que puede haber puesto fin a su larga carrera internacional. (Jeff Pachoud/AFP)
Lloyd celebra su segundo gol, con el que puede haber puesto fin a su larga carrera internacional. (Jeff Pachoud/AFP)

Tras volver de Rio de vacío por primera vez en su historia, Estados Unidos vuelve al podio olímpico. Con cuatro oros y una plata a sus espaldas, la campeona conquista ahora el bronce, indudablemente un premio muy inferior al que buscaba cuando llegó a Tokio pero bastante más ajustado a sus méritos que el oro al que se presentaba como principal, y única, candidata.

El equipo de Vlatko Andonovski ha ofrecido hoy su mejor imagen –aunque todavía muy alejada de la habitual, ha acabado pidiendo la hora– desde que comenzó el torneo para derrotar a una Australia (2-4) que, en frío, podrá reconfortarse por el paso adelante que ha dado alcanzando la final después de no haber superado nunca los cuartos de final en una cita intercontinental.

El consuelo de Estados Unidos lo ha firmado la vieja guardia, con sendos dobletes de Megan Rapinoe y Carli Lloyd. Un final emotivo precisamente porque puede ser el definitivo. Al menos para la delantera de New Jersey que, a sus 39 años, ha disputado su último partido olímpico y es posible que también haya puesto fin a su carrera internacional, que le ha llevado a conquistar dos Mundiales y los oros en los Juegos de Pekín y Londrés, amén de un sinfín de récords personales. Es algo más joven, cumplió 36 años el mes pasado, pero Rapinoe también tendrá complicado estar en París, aunque la californiana ya ha advertido a quien quiera jubilarle que se lo tome con calma todavía.

Ha sido la propia jugadora del OL Reign la que ha roto la igualada inicial. Había empezado con mejor pinta Australia pero, en la primera llegada al área de las estadounidenses, Micah ha enviado a córner un zurdazo de Press y Press lo ha convertido en un gol olímpico. Le ha sentado bien a su equipo pero Australia, que ya demostró con suerte desigual ante Gran Bretaña y Suecia que no se rinde, ha empatado en menos de diez minutos. Foord ha centrado para que Kerr cruzara ante Franch que, con Naeher lesionada en la rodilla en la semifinal, hoy ha jugado de inicio. 48º gol internacional para la delantera aussie, que superaba así a la histórica Lisa de Vanna. Y poco ha faltado para que repitiese sólo dos minutos después, cabeceando otro centro desde la izquierda al que ahora sí ha respondido Franch.

Sufría Estados Unidos con los centros laterales pero más aún sufría la defensa australiana, que ha echado mucho en falta a Carpenter, sancionada por su tonta expulsión en el descuento de la semifinal ante Suecia. Y que ha pagado el mal día de Kennedy. Precisamente un error de la zaguera de los Spurs ha habilitado a Rapinoe para que anotara el 1-2 en el 21, con un espectacular zurdazo de volea.

Han llegado los mejores minutos de la tetracampeona, que se ha adueñado del centro del campo por primera vez desde que arrancaron los Juegos, cosa que han agradecido sus puntas. Se ha comido la colegiada, con el beneplácito de la sala VOR, un penalti tonto de Kennedy sobre Rapinoe tras una buena acción de Lloyd pero la propia futbolista del Gotham lo ha subsanado en el descuento del primer tiempo anotando el 1-3. Horan ha robado el balón para filtrarlo en el área y Lloyd lo ha cruzado ante Micah con un movimiento de superclase.

A los seis minutos de la reanudación llegaba el cuarto de las estadounidenses. Envío de Press, nuevo error de Kennedy y otra definición magistral de Lloyd para hacer el 1-4. Parecía la sentencia. Y realmente lo ha sido aunque la reacción de las Matildas y una cierta relajación de su rival ha propiciado que la emoción regresara para mantenerse hasta el pitido final. En el 53, Simon centraba desde la derecha para que Foord, sóla en el área, cabeceara el 2-4.

Andonovski ha movido piezas pero no ha podido evitar que Australia, con más corazón e individualidades que juego, siguiera buscando a Franch. Ha vuelto a encontrarla en el 90, con una acción personal de Gelnik, que colocaba el 3-4 en el marcador y propiciaba un descuento de infarto. Han seguido apretando las australianas pero la cuota de disgustos de Estados Unidos ya estaba cubierta y han podido aguantar el bronce que, visto lo visto, no ha debido saberles tan mal.

Esta madrugada, la final

El torneo femenino se despide con la final, inédita, que enfrentará esta madrugada (03.00, horario de Euskal Herria) a Suecia y Canadá en el Olímpico de Tokio. Será la segunda consecutiva para el equipo europeo, el mejor del torneo, que se asegura así también su segunda medalla en los Juegos. La disputará por primera vez Canadá, que sube un peldaño tras los bronces de Londres y Rio.