Bidasoa-Irun encara la segunda jornada de la EHF European League con el objetivo de empezar con buen pie su periplo casero en la competición continental. Lo tiene de cara, pues el Pfadi Winterthur es uno de los rivales más flojos del grupo, si bien el técnico amarillo, Jacobo Cuétara, no se fía de los suizos.

Estos cayeron en el primer partido ante el potente Orlen Wisla Plock de manera apabullante (23-35), «algo que nos puede pasar a cualquiera», ha asegurado el preparador asturiano. «Espero a un equipo competitivo, pese a que tiene jugadores lesionados y otros que están de regreso, cogiendo ritmo competitivo», ha avisado.

Una situación muy similar a la que vive el conjunto vasco, quien también está en plena progresión deportiva, como demostró este pasado fin de semana recuperando la segunda plaza de la Asobal. Prolongar ese buen momento es lo que pretende un Bidasoa muy motivado por disputar ante su gente este torneo.

«Queremos revivir el ambiente espléndido que hubo en Artaleku cuando jugamos la Champions, esa relación con nuestros aficionados, que nos sirvió de apoyo para realizar la temporada que hicimos. ¡Qué menos que volver a disfrutar de este espectáculo con nuestra gente!», ha señalado Cuétara.

Para conseguir que la felicidad sea completa, con un triunfo local, Bidasoa debe mejorar el bloque derecho de su ataque, con un Renaud y Rodríguez que todavía no han alcanzado su pleno rendimiento, a diferencia de la positivia evolución de un Jon Azkue que estuvo magistral en la sobresaliente segunda parte ante el Nava.

A ello hay que unir que el cuadro guipuzcoano va limando también sus sus desajustes defensivos, lo que redunda en una mayor aportación desde la portería, con Ledó y un Sierra que parece vivir una segunda juventud. El buen momento de Rodrigo Salinas y la profundidad de banquillo bidasotarra deberían hacer el resto para doblegar al Pfadi.

«Son diez partidos en los que va a haber muchas subidas y bajadas en cuanto a clasificación y opciones, pero es muy importante sumar el mayor número de puntos posible en casa porque es una competición en la que va a ser muy difícil sacar algo fuera», ha comentado Cuétara respecto de la importancia del partido.

Siendo conscientes de que «hay mucho nivel y todo nos va a costar, pero con el objetivo de disponer de opciones en cada partido. En casa tiene que ser una obligación, sabiendo que hay rivales que, incluso jugando en nuestra pista, nos va a costar muchísimo ganarles», ha advertido.