En Nafarroa, no hay apenas plazas dedicadas a la Constitución española de 1978. La de Tutera es de las pocas excepciones. Este hecho quedó en evidencia cuando el PP, desde una visión completamente centralista, procedió a recoger firmas contra los indultos a los presos catalanes en las plazas con esta denominación en todo el Estado. Se encontraron con que en Iruñea, por ejemplo, no había. 

Enrique Maya, el alcalde de Iruñea, ha decidido subsanar este vacío y bautizar como «Plaza de la Constitución» a lo que ahora se conoce como Plaza del Baluarte, el espacio situado entre el Palacio de Congresos, el Parlamento y El Corte Inglés.

Así se lo ha comunicado esta mañana a la Junta de Portavoces. El alcalde ha decidido incluir este nombre en el callejero iruindarra tras recibir una solicitud del colectivo Sociedad Civil Navarra, un grupo con el objetivo de reivindicar la españolidad del herrialde. Según explica este grupo en su página web, participó en la concentración de policías en defensa de la Ley Mordaza que tuvo lugar la pasada semana en Iruñea.

El objetivo del cambio de denominación es «reconocer el esfuerzo de la sociedad en la llamada ‘Transición Democrática’ para dotarse de una ley de leyes que preservara la convivencia en el país y protegiera los derechos y las libertades de la ciudadanía», según señala una nota del Ayuntamiento de Iruñea, que recuerda que en el siglo XIX la Plaza del Castillo se denominó Plaza de la Constitución «en reconocimiento a las primeras cartas magnas aprobadas en aquella época en España».

Lo que no dice la nota del Ayuntamiento es que en 1893 se le cambió el nombre tras la revuelta popular en defensa de los fueros navarros que se llamó Gamazada.

Junto a ello, el Ayuntamiento de Iruñea destaca que numerosas ciudades, como Madrid, Sevilla, A Coruña, València, Zaragoza, Logroño, Valladolid, Toledo, Donostia, Vigo, Jaén, Málaga, Cádiz, Almería, Albacete o Ceuta, cuentan con una plaza o una calle dedicada a la Constitución.

El último cambio en el callejero de Iruñea lo realizó también Enrique Maya, cuando devolvió el nombre de Avenida del Ejército a una céntrica vía que su antecesor, Joseba Asiron, rebautizó como Catalina de Foix. Lo hizo diez días después de recuperar la Alcaldía.

Además, Maya ha decidido que una gran bandera navarra ondee en la Plaza de los Fueros.

EH Bildu: «Anuncio vacío»

EH Bildu ha rechazado la decisión de Maya, tras pedir al alcalde que «trabaje en los problemas reales de la ciudadanía en vez de hacer anuncios vacíos para ocultar su parálisis».

Junto a ello, la principal fuerza de la oposición municipal en Iruñea, reclama al equipo de gobierno que dé explicaciones sobre los efectos que la nevada ha tenido en la capital navarra este fin de semana en vez de «desviar la atención».

«Con esta actitud, Navarra Suma y Enrique Maya demuestran la parálisis de este equipo de gobierno que, en vez de anuncios de gestión, se ve obligado a echar mano del callejero y las banderas para tratar de crear agenda», ha destacado EH Bildu.

«Más valdría desatascar cuestiones como el Paseo de Sarasate, la Pasarela del Labrit, la intervención en clave de memoria democrática en los Caídos, la culminación de Pío XII, la actualización de la ponencia de valoración o el Plan de Vivienda», mantiene la coalición soberanista.

«Más allá de la preferencia o no de la nueva denominación para la plaza Baluarte o de que nadie cuestiona la insignia navarra, lo que es evidente es que ni una cosa ni otra es prioritaria para una ciudadanía aún golpeada por la pandemia, cuya situación económica empeora y que ve cómo quienes gobiernan el Ayuntamiento son incapaces de impulsar soluciones a cuestiones tan trascendentales como la vivienda, el refuerzo de los servicios sociales o las alternativas de ocio para la juventud», reflexiona el grupo abertzale.

«Una vez más, la estrategia de tinta de calamar define el gobierno de Maya, un gobierno alejado de los problemas de la ciudadanía, acuciado por sus urgencias electorales, necesitado de focos y polémicas para ocultar su ineficacia y un gobierno incapaz siquiera de cumplir sus compromisos políticos y presupuestarios», añade EH Bildu.