NAIZ
Madrid

El ‘sí’ de UPN decanta la balanza y permite al Gobierno español convalidar la reforma laboral

Los dos diputados de UPN se sumarán a los de PSOE, UP, Cs, Más País, Compromís, Coalición Canaria, Nueva Canarias, Teruel Existe y PRC, lo que garantiza al Gobierno español los 176 votos que le permiten sacar adelante la reforma laboral sin contar con PNV, EH Bildu o ERC.

Carlos García Adanero, diputado de UPN en el Congreso. (Iñigo URIZ/FOKU)
Carlos García Adanero, diputado de UPN en el Congreso. (Iñigo URIZ/FOKU)

El Gobierno español tiene garantizada, salvo sorpresa de última hora, la aprobación de la reforma laboral, aunque con una suma diferente a la de la investidura.

Los dos diputados de UPN han confirmado a última hora del miércoles que votarán a favor este jueves en el Congreso de la reforma laboral acordada por el Gobierno de Pedro Sánchez con la CEOE y los sindicatos UGT y CCOO, lo que permitiría alcanzar la mayoría necesaria para aprobar el decreto ley.

De esta forma, el Ejecutivo español lograría convalidar el texto con los 176 votos a favor de PSOE, UP, Cs, Más País, Compromís, Coalición Canaria, Nueva Canarias, Teruel Existe, PRC, PDeCAT y UPN.

Según ha explicado en conferencia de prensa el presidente de UPN, Javier Esparza, el partido ha decidido apoyar el decreto «por responsabilidad y por sentido de Estado» y porque no creen que esta votación sea un «plebiscito» sobre Pedro Sánchez. 

«Sin el apoyo de UPN, no se aprobaría, y pondríamos en riesgo la llegada de los fondos de la Unión Europea, que nos tienen que servir para hacer frente a la recuperación económica, y tiraríamos por la borda un acuerdo histórico entre los sindicatos más representativos de este país y la patronal», ha subrayado.

 

En el no, oposición y socios habituales

Por su parte, PP (88 escaños), Vox (52) y Foro Asturias (1) han confirmado su rechazo a la reforma, al igual que Junts (4).

A ellos podrían sumarse ERC (13), EH Bildu (5), la CUP (2) y el BNG (1), que han advertido de que votarán en contra si el Gobierno mantiene su negativa a modificar la reforma pactada con la patronal y abogan por tramitarla como proyecto de ley para mejorar el texto con sus enmiendas.

Todos esos grupos suman 166 diputadas y diputados, que podrían ser 172 con el PNV (6 escaños), formación que ya ha dicho que sin un cambio legislativo que blinde los convenios autonómicos su voto será ‘no’, y 173 con el exrepresentante de Ciudadanos Pablo Cambronero, adscrito al Grupo Mixto.

Presión sobre ERC

El Gobierno de coalición ha sacado toda su artillería para empujar a ERC a apoyar el decreto, incluyendo advertencias sobre el futuro de la gobernabilidad en Catalunya. De este modo, los Comuns han amenazado con retirar su apoyo parlamentario al Govern de Pere Aragonès en la Cámara catalana, al entender que ERC «hace pasar motivos electoralistas por encima de los avances que supone la reforma», pese a que el portavoz de los republicanos en el Congreso, Gabriel Rufián, lo niega.

Rufián que acusa indirectamente a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de no moverse y poner un «trágala» encima de la mesa. «No se puede llegar aquí y decir que son lentejas. Escucharemos hasta el último minuto, pero para negociar hay que hablar, y hoy por hoy están más preocupados por vender su relato», ha lamentado.

Díaz ha replicado que «este Gobierno no se levanta nunca de una mesa. Hay tiempo y el tiempo no es una excusa. Hemos presentado propuestas respetando el acuerdo del Diálogo Social que no han sido respondidas e instamos a ERC a que nos sentemos y se sienten a negociar con seriedad en una mesa».