La Fiscalía del Tribunal Supremo ha decretado el archivo de las denuncias presentadas por Manos Limpias y Ciudadanos contra el portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, por un delito de revelación de secretos a raíz de las declaraciones que el parlamentario realizó después de que la entonces presidenta del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, compareciese en la Comisión de Secretos Oficiales.
Fuentes jurídicas han confirmado a Europa Press el archivo de las mismas una semana después de que el fiscal de Sala de lo Penal José Javier Huete acordase la incoación de diligencias de investigación penal y designase al magistrado Antonio Pablo Rives como fiscal instructor.
El fiscal considera que las declaraciones de Rufián, en cualquier caso, solo podrían ser constitutivas de una infracción administrativa y, en ningún caso, de un delito de revelación de secretos.
Uno de los grupos denunciantes, Ciudadanos, ya anuncia que no tira la toalla y explora otra vía con la que pretende llegar al Tribunal Constitucional y que pone en el punto de mira a la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet. Esto es lo que ha dicho en redes su portavoz en la Cámara, Edmundo Bal.
No compartimos el archivo de la Fiscalía a nuestra denuncia contra Rufián por desvelar secreto oficiales. Es delito. Sin embargo, la acatamos y celebramos que, sin proceso penal, Batet no tiene excusas para suspenderle ya el sueldo y voto.
— Edmundo Bal (@BalEdmundo) May 19, 2022
Si la Mesa no actúa, acudiremos al TC.
Y es que, dado el carácter de la presunta infracción -en la que el Ministerio Público no entra apoyándose en el principio de mínima intervención-, las palabras de Rufián tras la Comisión de Secretos Oficiales tendrán que ser estudiadas en su caso por la Mesa del Congreso de los Diputados y no por la Justicia.