La localidad vizcaina de Busturia acogerá este sábado un acto en memoria de Anjel Lekuona, militante antifascista deportado y muerto en un campo del Tercer Reich en 1945, durante el que se colocará un ‘Stolperstein’ en su recuerdo. Será la primera de estas placas en recuerdo a las víctimas que habrá la CAV, aunque en la actualidad hay ya 75.000 colocadas en más de 20 países.

Anjel Lekuona, natural de Busturia, fue fusilado el 10 de abril de 1945 cuando era prisionero en el campo de concentración de Hraistko, tras ser deportado desde el Estado francés, donde se había exiliado después de la guerra de 1936, y pasar por otros campos. Sus cenizas reposan en el memorial del crematorio civil de Stranice en Praga, junto con los de otros prisioneros asesinados, cuyos restos fueron guardados y documentados por los encargados del crematorio pese a que les habían ordenado deshacerse de ellos.

En ese cementerio, Lekuona ya fue recordado el pasado mes de abril, junto a otras víctimas, en un acto impulsado por el Ayuntamiento de Praga, los responsables del cementerio de Strasnice y el grupo de trabajo para la preservación de la memoria de los deportados del campo de Hradischko, compuesto por familiares de víctimas e investigadores.

Ya entonces se anunció la intención de colocar en Busturia una ‘Stolperstein’, una placa-baldosa conmemorativa, con el nombre y la fecha de nacimiento y muerte de Anjel Lekuona. El proyecto ‘Stolpersteine’ es una iniciativa para mantener viva la memoria de las víctimas del nazismo que lleva colocadas 75.000 placas en más de 20 países, han explicado desde el Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, Gogora.

La colocación de este primer ‘Stolperstein’ se llevará a cabo durante un acto que se desarrollará este sábado con la presencia de la directora de Gogora, Aintzane Ezenarro, el alcalde de Busturia, Aitor Aretxaga, el sobrino de la víctima Antón Gandarias y el investigador Unai Egia, miembro del grupo de trabajo para la preservación de la memoria de los deportados del campo de Hradischko, así como familiares de otras personas deportadas que no salieron con vida.

Asimismo, durante el acto de recuerdo, se emitirá también un vídeo sobre Anjel Lekuona y el proceso de su familia para recuperar su memoria.

Según los datos de la investigación ‘La deportación de los vascos a los campos del Tercer Reich (1940-1945)’ que publicó Gogora en 2020, 253 personas fueron deportadas. De ellas, 113 murieron, 125 salieron con vida y se desconoce lo sucedido a otras 15.