Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

Centenario de Jonas Mekas, el hombre-cámara referencial del cine de vanguardia

Jonas Mekas es considerado «padre del cine underground» y a través de su inabarcable obra filmada transformó en poesía lo cotidiano. Fue inspirador de cineastas como Martin Scorsese y Jim Jarmush, y entre sus amistades figuraron Andy Warhol, la Velvet Underground, John Lenon, Yoko Ono y John Cage.

El cineasta Jonas Mekas.
El cineasta Jonas Mekas. (Giulio Favotto | Lithuanian Culture Institute)

Todos las mañanas, Jonas Mekas encendía su cámara de 16mm, su Bolex o su digital para filmar su diario interminable.

Un ejercicio de mecánica creativa que acabó transformándolo en una cámara que respiraba, caminaba y nunca parpadeaba.

Mekas amaba ese instante primitivo del cine en el que todavía no había perdido su inocencia. Ejemplo de ello fue su película ‘Walden’ (1969), en la que atrapó la alegría ajena que hizo propia a través de encadenados de imágenes de flores y juegos de niños, la saludable mecánica de la alegría cotidiana sobre la que el cineasta dijo «no busco nada, por eso soy feliz».

Poesía a través de la voz y el movimiento

Nació en un pequeño rincón rural de Lituania en 1922, y llegó a Nueva York a finales de los 40 tras huir de los campos de concentración nazis y de los reclutamientos de la Unión Soviética.

En 1958 se convirtió en el primer crítico de cine del ‘Village Voice’, un periódico de culto de Nueva York, donde se estableció entre la comunidad vanguardista del séptimo arte.

En una de sus películas dejó grabada su voz en off: «Imágenes, solo imágenes en desorden, hay un orden en el desorden. Debo admitir que hago estas películas para mí y tal vez un grupo de amigos».

Su círculo de amistades se componía de Andy Warhol, la Velvet Underground, John Lenon, Yoko Ono, Stanley Brakhage y John Cage, entre otros muchos.

A medida que pasaban los años, dicho círculo fue expandiéndose y en él tambien tuvo cabida el prestigioso cineasta catalán José Luis Guerín, con quien mantuvo las 'Correspondencias' –cartas filmadas–.

En la carta número 5 de Guerín a Mekas, el firmante de propuestas como ‘En construcción’ (2001) le dijo a Mekas: «En los setenta, sin apenas un conocimiento directo del cine underground, lo cierto es que lo pensábamos, lo leíamos, lo imaginábamos, incluso a veces lo filmábamos. Eran años antiimperialistas y, sin embargo, el inglés sonaba muy bien. Su labor, sus textos nos amparaban, así lo sentíamos. Usted y Jean Cocteau dignificaron nuestra precariedad. Por todas partes veíamos aparecer colectivos, manifiestos, revistas, discusiones, fábricas de creadores. Se abrían innumerables caminos que podían ir del activismo a la etnografía pasando por la poesía y que mantenían un horizonte común: el horizonte de un nuevo cine. Esa promesa de un nuevo cine posibilitaba un sentimiento comunitario. Y no solo entre cineastas, ¿eh?».

Mekas siempre apostó por la inquietud, y se empleó a fondo en la difusión de un cine alternativo a Hollywood y cofundó el Film-Makers' Cinemateque, donde se veían películas ajenas a la corriente cultural dominante y esta iniciativa derivaría en el Anthology Film Archives, uno de los centros de referencia de cine experimental y películas de difícil acceso para el público.

Continuó siendo una personalidad activa en su campo hasta el final de su vida, acontecido en 2019, y apareció en varios festivales de cine y protestas, como ‘Occupy Wall Street’, el movimiento protesta surgido en Nueva York durante la crisis económica iniciada en 2008.

Cineasta, poeta y curador, fue considerado el padrino del cine estadounidense de vanguardia y un absoluto tótem del llamado cine diarístico, un modelo fílmico en el que también han experimentado cineastas como Warren Sonbert.

Entre sus obras más relevantes figuran ‘Walden’ (1969), ‘Reminiscences of a Journey to Lithuania’ (1972), ‘Lost, Lost, Lost’ (1975), y ‘Zefiro Torna’ (1992). También destacan su ‘Reminiscencias de un viaje a Lithuania’, donde repasó su cautiverio en los campos de concentración, su llegada a Brooklyn y sus impresiones a la vuelta a su país 27 años después de haber sido perseguido de joven.

En dicho metraje su voz dice «durante mi vida no he hecho otra cosa que intentar capturar la intensidad de aquellos momentos».

Películas diario

En 2001, se estrenó una película-diario de 5 horas de duración llamada ‘As I Was Moving Ahead, Occasionally I Saw Brief Glimpses of Beauty’ –‘Mientras avanzaba, ocasionalmente vi pequeños destellos de belleza’–, montado a partir de imágenes de distintas grabaciones acumuladas a lo largo de 50 años de su vida y en 2007, Mekas aportó 365 cortometrajes –publicando uno cada día del año– a través de la red para Apple Computer, pensados para ser reproducidos empleando el iPod.5​.

Toda su obra adquiere la dimensión de un monumental diario que inició, de manera escrita, en 1944, y que dio un giro en 1955 cuando cambió lo escrito por lo filmado a través de la cámara Bolex que compró con el dinero que pidió prestado a un amigo.

Entre sus capítulos, el cineasta dejó escrito-filmado lo siguiente «un diario es un lazo con uno mismo cuando se pierden los lazos, cuando todas las cosas en que uno creía se desquiciaron».