Ion Salgado

ELA, LAB y ESK, abiertos a reducir los paros en Mercedes para lograr «la mayor unidad posible»

ELA, LAB y ESK han trasladado una propuesta a UGT, CCOO, Ekintza y PIM para intentar buscar «la mayor unidad posible» en las movilizaciones en Mercedes y, para ello, se han mostrado dispuestos a acordar una huelga los próximos días 29 y 30, desconvocando los otros tres paros previstos.

Concentración de los trabajadores de Mercesdes-Benz en el centro de Gasteiz.
Concentración de los trabajadores de Mercesdes-Benz en el centro de Gasteiz. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

Los trabajadores y las trabajadoras de la planta de Mercedes-Benz en Gasteiz protagonizaron el miércoles una jornada de huelga «sin precedentes», tal como señaló el presidente del comité, Igor Guevara. Pararon la producción para reclamar avances en la negociación del convenio colectivo y denunciar la actitud de la dirección, que supedita la llegada de una inversión de 1.200 millones de euros a una mayor flexibilidad.

La huelga partió de dos convocatorias paralelas: una de ELA, LAB y ESK, y la otra de UGT y CCOO. Estos dos últimos sindicatos tienen anunciada otra huelga para el día 29 y los tres primeros otros días de paro entre el 27 de junio y el 1 de julio.

Sin embargo, ELA, LAB y ESK han trasladado este jueves una propuesta a UGT, CCOO, Ekintza y PIM para intentar buscar «la mayor unidad posible» en las movilizaciones, y, para ello, se han mostrado dispuestos a convocar solo dos días de huelga, los días 29 y 30, y desconvocar los otros tres paros previstos.

Según han informado en un comunicado, están dispuestos a tomar esta decisión «siempre que haya un compromiso claro» con el rechazo a la sexta noche y a que se celebre una asamblea general el día 29. No en vano, «es una fecha en la que coincide una convocatoria del 80% del comité».

Esperan repetir así el seguimiento del miércoles, cuando paró el 95% de la plantilla de los talleres, según los datos aportados por ELA. Un éxito que no ha sorprendido a la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, quien ha reconocido que entiende las «tensiones» existentes entre la dirección y los sindicatos, debido a la «incertidumbre» provocada por el aumento de los precios.

No obstante, ha mostrado su confianza en la «capacidad» de las partes implicadas para hacer que la negociación llegue «a buen término». Y ha manifestado la «ilusión» que producen los planes de la compañía, con los que está dispuesta a afianzar la colaboración público-privada.

Lakua espera conocer la decisión de Mercedes «lo antes posible»

En este sentido, ha recordado que el 5 de julio acompañará al lehendakari, Iñigo Urkullu, a Alemania para mantener una reunión con los directivos de la multinacional, que todavía no han dado a conocer una decisión definitiva sobre la inversión en la planta de Gasteiz.

Tapia espera conocer la decisión «lo antes posible», «en torno» al verano o «después» de las fechas estivales.

Conviene recordar que la empresa advirtió hace dos días que la convocatoria de huelgas es «totalmente incoherente» con el plan inversor, que está «condicionado a alcanzar un acuerdo satisfactorio del convenio colectivo».

«Flexibilidad por las dos partes»

Por su parte, el diputado general de Araba, Ramiro González, ha señalado que «esto solo se arregla con flexibilidad entre las dos partes y hay que pedir un mayor esfuerzo del que han hecho hasta ahora, porque no ha servido, para llegar a un acuerdo. Sin presiones».

En un foro organizado por Vocento, ha aseverado que está en juego «el futuro de los 5.000 trabajadores» de Mercedes, y el de «los 30.000 empleos indirectos. Es tremendo lo que nos jugamos».

Ha aseverado que los 1.200 millones de euros que podría desembolsar Mercedes en el herrialde supone «la mayor inversión que hemos tenido en nuestra historia», por lo que considera «lógico y razonable» que la multinacional necesite «estabilidad» y quiera conocer «en qué marco se va a producir esa inversión».