Tras dos años sin poder venir al herrialde a causa del covid-19, los niños saharauis que veranean en Nafarroa han sido recibidos en el Ayuntamiento de Iruñea, en un acto en el que han intervenido el alcalde Maya, el delegado de la República Árabe Saharaui Democrática en Nafarroa, Lehbib Breika, y la responsable del programa Vacaciones en paz de la Asociación Navarra Amigos del Sahara, Carol García.

Maya ha deseado a los niños acogidos una «feliz estancia, pese a estar lejos de su entorno» y ha expresado su gratitud hacia las familias de acogida, además de reconocer también el trabajo de la Asociación Navarra de Amigos del Sahara.

Por su parte, Breika ha agradecido al Consistorio su compromiso y ha apuntado que el Ayuntamiento de Iruñea «siempre ha formado parte de la lista de ayuntamientos que han ayudado al pueblo saharaui», al tiempo que ha destacado que «lo más importante es que no se olvide la situación que se está viviendo en el Sahara».

Sacarles de la guerra

Carol García ha puesto en valor la predisposición de las familias y el hecho de que «nunca han puesto problemas por el cambio de fechas que ha habido» y también ha recordado que muchos familiares de los niños de acogida se encuentran luchando en la guerra y «sacarles de ahí, es lo más importante».

La falta de continuidad de esta iniciativa debido a la pandemia ha hecho que la mayoría de las familias se estrenen y se han centrado en la acogida de menores de 8 años, y otros niños de entre 9 y 12 años se desplazan para recibir atención médica y se acogen en la vivienda que la asociación les ofrece, así como para recibir una alimentación más equilibrada y alejarse de las altas temperaturas de su tierra.

El programa Vacaciones en paz de ANAS, en marcha desde 1997, permite a los pequeños conocer otra cultura y pasar un verano en condiciones bien distintas de las que tienen en los campos de refugiados de Tindouf, en el suroeste de Argelia, en los que viven más de 200.000 desplazados.

La expedición llegó a Nafarroa el sábado 23 de julio y tiene previsto su regreso el 6 de septiembre como máximo. Durante su estancia, están agendadas visitas a otras instituciones, como el Parlamento navarro, el Gobierno de Nafarroa o la Federación de Municipios y Concejos. Asimismo, visitarán empresas o el parque de la naturaleza Senda Viva, acompañados por familias y monitores.