La intersindical ha dado comienzo al curso con una movilización que ha recorrido Baiona. La manifestación, que según la organización ha contado con la participación de unas mil personas, ha salido de la plaza Santa Ursula y ha terminado frente a la subprefectura, tal y como ha recogido Kazeta.

CGT, FSU, LAB, Solidaires y el sindicato de estudiantes del liceo USL han tomado las calles en defensa de los sueldos, las pensiones y los servicios públicos. Agentes de diversa naturaleza y los partidos políticos Euskal Herria Bai, Francia Insumisa y NPA han apoyado tanto la marcha como el día de huelga.

La elección de la fecha no ha sido casual, ya que hoy mismo darán comienzo los debates sobre los Presupuestos del Estado y los Presupuestos de la Seguridad Social en la Asamblea Nacional francesa, en París.

Esta tarde será el turno del primer ministro Michel Barnier, elegido por Emmanuel Macron despreciando la victoria de la izquierda en las elecciones legislativas del 7 de julio. El político de derechas defenderá frente al Parlamento su plan de gobierno.

En lo referente a la reforma de las pensiones, Barnier se ha planteado la posibilidad de hacer cambios, si bien no ha concretado más por el momento. En la misma línea, sobre la reforma referente al paro que ha enfadado también a los sindicatos, no ha rechazado el diálogo social. Sin embargo, los agentes y ciudadanía que se han movilizado hoy en Baiona desconfían de las decisiones que pueda tomar el Gobierno.

Antes de conocer el contenido de la intervención de Barnier de esta tarde, los sindicatos han llamado a reactivar las movilizaciones en todo el Estado francés.

Cabe apuntar que CFDT no ha apoyado el llamamiento de hoy. Siendo el sindicato principal, esto tendrá efectos evidentes: Por el momento, no se repetirá la imagen de unidad que han estado dejando las movilizaciones para paralizar la reforma de pensiones de estos dos últimos años.

Los convocantes de la movilización de hoy no descartan volver a manifestarse.