Las obras de construcción del nuevo edificio de Consultas Externas de Basurto comenzarán en octubre, con los trabajos de adecuación del recinto hospitalario como paso previo a la ejecución del proyecto y una inversión total de 135 millones.

La nueva infraestructura tendrá una superficie de 38.000 m2 que estarán distribuidos en dos bloques y albergarán alrededor de 175 consultas. Su construcción durará tres años. Si todo avanza según lo planificado, la construcción estará concluida a finales de 2028 y, tras su equipamiento, el servicio en el nuevo edificio estará plenamente operativo en 2029.

El edificio se construirá en el espacio que ocupa ahora el aparcamiento de profesionales y parte del antiguo edificio de la facultad de Medicina de EHU. Esta primera fase permitirá compatibilizar la actividad asistencial diaria con el desarrollo de la obra, minimizando las afecciones en el entorno sanitario.

El plazo de ejecución del proyecto es de 36 meses y, además de salas de tratamiento, pruebas y procedimientos, contará con un área de Radiología ambulatoria y el servicio de Farmacia.

En la presentación este viernes del proyecto, el consejero de Salud, Alberto Martínez, ha explicado que, en la actualidad, las Consultas Externas de Basurto están dispersas por varios pabellones, lo que incluye «desplazamientos internos de profesionales y pacientes que generan un flujo y tráfico de personas que, aunque nos hayamos acostumbrado, puede ser mejorable y optimizable».

En este sentido, Martínez ha subrayado que «este cruce de pacientes hospitalizados con pacientes ambulatorios lo vamos a evitar en el futuro», ya que, ha resaltado, «el nuevo edificio permitirá ordenar los espacios de manera accesible con un diseño mejor adaptado a las necesidades de la ciudadanía además de con un estilo más moderno y funcional».

Afecciones al tráfico y accesos

Durante la ejecución de los trabajos se aplicarán medidas especiales de organización en materia de accesos desde el mismo inicio de las obras, en que se cerrará la entrada actual de Capuchinos.

A partir de ahí, se habilitarán accesos alternativos para las personas usuarias por la esquina de la calle Gurtubay (pabellón Arrupe) y por la entrada de la avenida Montevideo. Asimismo, se está trabajando para habilitar una entrada exclusiva destinada para profesionales.

En cuanto a las afecciones al tráfico, el acceso al recinto hospitalario se garantizará en todo momento, si bien se prohibirá el aparcamiento en el interior. El actual carril que rodea el hospital y que es de un solo sentido se cortará, por lo que algunas zonas se transformarán en vías de doble sentido.

Esto conllevará no solo la prohibición de aparcamiento en el interior del recinto, sino también alteraciones para peatones, la reubicación de algunas instalaciones como los contendores y el traslado de la parada de taxis fuera del recinto.

En cuanto al aparcamiento, el nuevo edificio se emplazará donde actualmente está ubicado el parking para profesionales, por lo que este desaparecerá. Por ello, la OSI Bilbo Basurto ha llegado a un acuerdo con la intermodal para ofrecer un servicio de estacionamiento para los profesionales durante la duración de las obras.