NAIZ

EH Bildu califica de «escandaloso» que la promotora de Zaldunborda exija catorce millones

Para EH Bildu, que la promotora de Zaldunborda pida catorce millones de euros al Ayuntamiento de Hondarribia es «un escándalo». Tras la información publicada por GARA y NAIZ el sábado denuncia «el clientelismo, el enchufismo y las puertas giratorias» como forma de actuar del PNV.

Zona de Zaldunborda, en Hondarribia, donde estaba previsto construir un macro outlet.
Zona de Zaldunborda, en Hondarribia, donde estaba previsto construir un macro outlet. (Jon URBE | FOKU)

Tras la información publicada el sábado por GARA y NAIZ sobre la contratación del exalcalde de Hondarribia Aitor Kerejeta por una empresa vinculada al proyecto de Zaldunborda, EH Bildu ha destacado que «el clientelismo, el enchufismo y las puertas giratorias son una forma de actuar recurrente en el PNV» y subraya que «no se trata de un caso aislado». Cita como casos «el del ex diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, o el exlehendakari del EBB, Andoni Ortuzar».

La formación soberanista recuerda que el proyecto de macro outlet de Zaldunborda fue aprobado en junio de 2019 por el entonces alcalde de Hondarribia, Txomin Sagarzazu, antes de que al día siguiente se aprobara en el Parlamento de Gasteiz, a iniciativa de EH Bildu, la ley de centros comerciales. Posteriormente, el TSJPV dejó sin efecto en 2020 el PGOU de Hondarribia debido a los defectos de forma cometidos en su procedimiento de aprobación. «Con la anulación del Plan General, el proyecto de Zaldunborda era técnicamente inviable porque la Ley 10/2019 de grandes establecimientos comerciales estaba en vigor», afirma.

«A la vista de la inviabilidad técnica existente en este litigio y de que las puertas giratorias interiores del PNV no cesan, resulta un sinsentido y un escándalo que el promotor del macro outlet reclame al Ayuntamiento de Hondarribia catorce millones de euros», añade EH Bildu en una nota.

«Estas prácticas políticas no son éticas, provocan una gran indignación en la ciudadanía y, en consecuencia, desafección. Enfrentarse al amiguismo y al juego sucio es una obligación ética y una condición indispensable para construir un país mejor», subraya.