La refundación bien entendida, empieza por uno mismo. La ampliación de capital de Saski Baskonia no solo quiere implicar a la capital gasteiztarra a la sociedad alavesa, o a sus abonados -repartidos por toda Euskal Herria-. Desvelado primero por la Cadena COPE y confirmado por diversos medios de Gasteiz, la refundación baskonista busca involucrar a la plantilla del Laboral Kutxa Baskonia y hasta a los trabajadores del club.

De hecho, los empleados del club gasteiztarra -así como los del BAKH, la Ciudad Deportiva del Baskonia- se muestran bastante escamados ante la insólita propuesta de sus jefes. Nada menos que se les pide dos meses de su salario bruto «para la causa» -sueldos comunes y corrientes y sin nada que ver con el de los deportistas profesionales-, mientras que al plantel se le solicita 15 días de sus honorarios. Al mismo tiempo, la oferta de renovación de Andrés Nocioni, que baraja sus opciones de regresar a la NBA, es convertirlo en accionista de Saski Baskonia a cambio de un salario más reducido. Que se sepa, esta propuesta no ha hecho mucha gracia al alero de Santa Fe.

Contraprestación

En un mundo guiado por el interés mercantil, renunciar a dos meses de sueldo precisaría una contraprestación de entidad.

A día de hoy, los empleados del Baskonia y del BAKH recibirían una oferta de dos abonos para seguir al Baskonia y al Alavés, así como diferentes entradas para acceder a las infraestruturas de la Ciudad Deportiva y los conciertos que se celebren en el Buesa Arena. Magra fortuna, al menos en principio.