Imanol INTZIARTE
DESDE LA GRADA

«Hacer una limpia»

En el entorno realista, foros y redes sociales, está cobrando auge en las últimas semanas la expresión «hacer una limpia». Lo cierto es que con actuaciones como la de este lunes en el Martínez Valero los jugadores no ayudan a aplacar las iras de una afición que está soportando un vía crucis desde aquella eliminación en Krasnodar.
Ya casi nadie discute que la apuesta por un nuevo dibujo derivó en una composición determinada de la plantilla, y que fracasada la idea base al resto del traje se le saltaron las costuras. Al menos se engatilló una racha de resultados que evita males mayores.   
Urge terminar esta campaña de la mejor forma posible –y eso no pasa precisamente por dar una imagen como la de Elche– y pulsar en verano el botón de reiniciar, con los retoques, altas y bajas que la dirección deportiva y el entrenador –en principio Loren y Moyes, aunque nunca se puede asegurar nada– consideren necesarios. Poderes tiene el Consejo y doctores Zubieta para dar nombres y apellidos.    
De ahí al listado de una docena de “expulsados” que manejan algunos en los momentos de entendible cabreo media un trecho. En esos momentos me acuerdo de una de las míticas frases de J.B. Toshack, pronunciadas con su peculiar acento galés tras una dolorosa derrota: «Los lunes siempre pienso en cambiar a diez jugadores, los martes a siete u ocho, los jueves a cuatro, el viernes a dos y el sábado ya pienso que tienen que jugar los mismos cabrones de siempre».