Francia, actual campeón continental y mundial, es el gran rival a batir en el Europeo de Balonmano que a partir de hoy se juega en Polonia, de actualidad también por las medidas autoritarias de su gobierno, que pueden tener correspondiente contestación en las canchas. El capitán de la selección sueca, Tobias Karlsson, ya ha pedido permiso a la Federación Europea para portar un brazalete con los colores del arcoiris, en solidaridad con el colectivo homosexual, amenazados por las leyes restrictivas que ha puesto en marcha el ejecutivo polaco.

En lo estrictamente deportivo, muy poco parece haber variado en lo que se refiere al favoritismo de los combinados que entrarán en liza. Que el sempiterno Claude Onesta haya reinven- tado a los suyos, como se ha demostrado en las dos últimas grandes citas balonmanísticas, le da una cierta ventaja –aunque él no lo vea así–, al menos en lo psicológico, respecto a los candidatos a destronar al gigante galo, caso de Dinamarca, España o la anfitriona.

Liderados por Mikkel Hansen, único jugador que hace sombra a Nikola Karabatic, los daneses tienen suficientes mimbres como para plantarles cara a los galos, pero antes deberán resolver sus problemas defensivos –perdieron 36-28 el pasado domingo en París– por la ausencia del pivote René Toft Hansen, a la que hay que unir la baja del lateral Lasse Andersson, una de las revelaciones de la presente edición de la Liga de Campeones.

Bastante más poderoso en la contención, el combinado español aspira a romper el maleficio que le persigue en este torneo, en el que se ha quedado hasta en tres ocasiones –1996, 1998 y 2006– a las puertas del oro. Superar las semifinales, altura en la que se ha visto eliminada en las dos últimas competiciones, es el reto de una escuadra que confía para ello en la recuperación del guardameta Sterbik y en la del central Joan Cañellas, aquejado por una lumbalgia.

A Polonia, bronce en el último Mundial, también hay que incluirla en ese trío de candidatos, pues, además de contar con el inestimable apoyo de su público, se trata de una selección que ha crecido exponencialmente en los últimos tiempos. Su mejor tarjeta de presentación son los cañoneros Bielecki, Jurecki y Lijewski, aunque tendrá problemas en la dirección por la falta segura de Tkaczyk y Jaszka, además de la probable de Mariusz Jurkiewicz.

Otrora integrante de las quinielas por el triunfo, ahora Croacia debe conformarse con ser una de las posibles revelaciones del torneo. Los balcánicos, también mermados por las lesiones –Stepanjic– e inmersos en un cambio generacional, aunque siempre competitivos, estarán expectantes a cualquier fallo de sus rivales.

Importantes ausencias

No será el Europeo 2016 escaparate para alguna de las figuras continentales. Además de las selecciones citadas, otras van a sufrir del mismo modo la ausencia de algunos de sus jugadores franquicia. Especial relevancia tiene este factor para Alemania, cuya segunda línea titular –Groetzki, Gensheimer y Wiencek– no estará presente en el torneo, lo que limita notablemente las opciones de los germanos.

Algo similar le ocurre a Serbia, que no dispondrá de su bombardero Momir Ilic, o Islandia, con Gudmundsson. Albert Rocas, Jerome Fernández, Accambray o Barachet completan la lista de importantes ausencias. Los jugadores se han quejado de forma mayoritaria por lo apretado del calendario.

Julen Aginagalde, Mindegia y Gurbindo integran la participación vasca

El irundarra Julen Aginagalde, uno de los mejores pivotes del mundo y pieza básica en la selección española, el central de Doneztebe Niko Mindegia y el lateral derecho de Barañain Eduardo Gurbindo, reconvertido últimamente a extremo, componen la participación vasca en este Europeo de Polonia. Los tres jugadores están acostumbrados a manejarse al más alto nivel, pues militan en conjuntos que compiten en la Liga de Campeones, como el Kielce polaco, Pick Szeged húngaro y Barcelona, respectivamente.

Como ya viene siendo habitual en los últimos torneos, los resultados de la primera fase computarán de cara a la segunda –se jugará del 21 al 27–, en la que los tres mejores del grupo A se medirán a los del C, al igual que los del B lo harán con los del D. Los dos primeros de cada uno de estos bloques pasarán a las semifinales que se disputarán el 29, mientras que la final se celebrará el 31 a las 17.30 en Cracovia.

Teledeporte retransmitirá en directo el mejor partido de cada jornada, así como los encuentros que disputará la selección española, junto a las semifinales y la final. Las emisiones se estrenarán hoy con el encuentro que medirá a la actual campeona, Francia, y a Macedonia, a partir de las 18.00.N.M.