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DAMASCO

El Ejército sirio lanza un asalto en Latakia en el quinto día del cese de hostilidades

Las fuerzas gubernamentales sirias lanzaron ayer un asalto para capturar una colina controlada por los rebeldes en el noroeste de Siria, según un responsable insurgente y el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una expansión de las operaciones que han proseguido en la zona pese al acuerdo de cese de hostilidades. Los rebeldes indicaron que el asalto en la colina de Kabani, en la provincia de Latakia, estuvo respaldado por bombardeos aéreos rusos. Tanto el Gobierno como los rebeldes se acusan mutuamente de violar el cese de hostilidades, que entró en vigor el sábado y que no incluye al Estado Islámico (ISIS) y Frente al-Nosra (filial de Al Qaeda).

La colina está junto a la localidad de Jisr al-Shughur, controlada por los rebeldes, en la vecina provincia de Idleb, y la llanura de Ghab Plain. Si el Ejército toma la colina, su situación pondría en una posición difícil a los insurgentes, según el Observatorio. Un comandante rebelde aseguró que «las batallas continúan en zonas vitales que el régimen quiere. Hay bombardeos y enfrentamientos», en referencia a zonas en las provincias de Latakia, Homs y Hama.

En general, la Casa Blanca constató un descenso en el número de ataques contra civiles pero expresó su preocupación por las informaciones sin confirmar acerca de que el Ejército habría atacado a civiles con artillería pesada.

Por su parte, las milicias kurdas de las YPG repelieron un ataque del ISIS contra Tel Abyad, en la frontera con Turquía, durante el fin de semana, en el que murieron 45 de sus combatientes. También lanzaron una ofensiva sobre la carretera al norte de Alepo, bajo control insurgentes. Ante la inquietud de Turquía por las milicias kurdas, EEUU, que apoya a las YPG, advirtió ayer de que todos los grupos rebeldes en Siria deben estar a salvo de ataques durante el cese de las hostilidades, con excepción del ISIS y Al-Nosra y pidió a los kurdos que centren sus acciones en el ISIS.