La Audiencia de Bizkaia ha condenado a cuatro años y seis meses de prisión al exdelegado de Vivienda de Bizkaia José María Gonzalo, nombrado cuando Javier Madrazo era consejero, por dos delitos continuados de malversación de caudales públicos y prevaricación.

La Sección Segunda condena a Gonzalo por las irregularidades detectadas en el proceso de liquidación del patrimonio de la Cámara de la Propiedad Urbana de Bizkaia entre 2006 y 2009. Además de la pena de prisión, la Audiencia le condena a una inhabilitación absoluta por ocho años y a una inhabilitación especial para empleo o cargo público de ocho años y seis meses, así como al pago de una indemnización de 393.714 euros. Sin embargo, absuelve como cooperador necesario a la otra persona juzgada, Jon Alonso, que fue contratada como contable.

En la sentencia, contra la que cabe recurso ante el Supremo, se indica que en este caso «nos hallamos ante una sucesión de actos arbitrarios», sin fundamentación jurídica alguna «salvo la voluntad del encausado, que favoreció a personas o asociaciones de su entorno, aprovechando que tuvo en sus manos la liquidación de un patrimonio no escaso, que debía revertir al erario».