GARA
ONDARROA

Residentes de Kamiñalde recogen enseres pero el cordón de seguridad se mantiene

Policía Municipal y Ertzaintza vigilan la zona acordonada que prohíbe el acceso a las viviendas de las calle Kamiñalde de Ondarroa afectadas por el corrimiento de tierras de la ladera, después de que entre la tarde del sábado y ayer se organizara la entrada de los residentes y comerciantes, por turnos, para recoger enseres personales.

Análisis geológicos evidencian que persiste la «tendencia de caída» del monte, razón por la que 176 familias han sido desalojadas y se mantiene la situación de emergencia en la zona.

Representantes municipales están al frente de la mesa de crisis que se reúne a diario e informan sobre las novedades en la web www.udalbarriak.eus. Técnicos de la sociedad pública para la conservación forestal Basalan, de la Diputación vizcaina, equipados con un dron se unieron ayer a las dotaciones de bomberos desplazadas al lugar, en el que los expertos siguen pendientes de los movimientos en el talud. El aparato permitió captar imágenes aéreas que ayudan a los geólogos a evaluar la situación.

Urkullu visita la zona

El lehendakari, Iñigo Urkullu, visitó ayer la zona, junto a la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, y el consejero de Empleo y Políticas Sociales, Ángel Toña. Urkullu, que destacó la «colaboración institucional» con la que se está abordando esta crisis, dijo que la prioridad es reorganizar a las familias afectadas e hizo un llamamiento a quienes tienen casas vacías para que las pongan a disposición de Bizigune.