Entre Tim Duncan, Manu Ginóbili y Tony Parker, los San Antonio Spurs sumaron un total de 16 puntos, con una carta de tiro de 6 de 12. Un poco pobre para unos jugadores referencia en una Semifinal de Conferencia de la NBA. Y, sin embargo, los texanos barrieron a Oklahoma City Thunder por 124-92.

Claro, es que Gregg Popovich tiene otro big three en nómina: 38 puntos para LaMarcus Aldridge; 25 puntos para Kahwi Leonard; 18 tantos más –con cinco triples– para Danny Green. Renovación completa para unos Spurs lanzados pese a la evidente vejez de sus estrellas.

Por la vía rápida

El primer cuarto terminaba con 43-20 para los Spurs. Y punto. Kahwi Leonard inauguraba el marcador con un mate en penetración, y entre el alero –MVP de las Finales de 2014– y Aldridge destrozaron a unos Thunder en el que solo Serge Ibaka ofreció respuesta alguna.

En cambio, Durant y Westbrook se quedaron muy por debajo en anotación, sumando un 11 de 34 en tiros de campo, mientras los texanos se solazaban a su costa. Hasta 11 jugadores locales dieron al menos una asistencia, para un total de 39 pases de canasta de los de San Antonio.

«La defensa encendió nuestro ataque», opinaba Danny Green. «Los hemos dejador fríos, cosa que nos ha facilitado romper el partido. Movimos el balón muy bien y pudimos realizar tiros sin ninguna oposición», añadía.