Beirán y Vidorreta ahondan la crisis de juego baskonista
La intermitencia de los gasteiztarras les impidió marcharse al principio y marcar el ritmo del duelo después.Con 68-71, Beaubois clavó cuatro puntos seguidos, pero el palmeo de Beirán dio el triunfo a los aurinegros.

SASKI BASKONIA 72
IBEROSTAR TENERIFE 73
Aunque nadie lo diga, Saski Baskonia está en crisis, y lo estaría igual de haber ganado ayer a Iberostar Tenerife, porque tantas turbulencias en su juego no son normales. Pero hete aquí que, después de que Beaubois levantara un 68-71 adverso con dos canastas, logrando a 6 segundos el 72-71, el cuadro lagunero ganó. Tiempo muerto de un Txus Vidorreta que le ganó la partida a Sito Alonso, aclarado para Davin White y penetración de este ante Larkin. Beaubois y Hanga se lanzan a taponar en ayuda, logrando que la bandeja de White no entre, pero Beirán, que juega casi a la chita callando, anotaba el palmeo que daba el triunfo al cuadro aurinegro, chafando del todo la negra semana baskonista.
Le cuesta mantener el ritmo a este Saski Baskonia, algo que sus rivales aprovechan para no dejarse ir. Excepto en el partido ante Fenerbahçe, los de Sito Alonso parecen moverse a tirones, con el añadido de que la defensa solo eleva su nivel cuando en ataque salen las cosas.
De esta guisa, heridos en su orgullo, los gasteiztarras arrancaban con un 7-0 a favor, con un mate de Hanga a la contra como demostrativo que la paliza encajada ante el CSKA de Moscú estaba olvidado y que el conjunto lagunero sería la víctima propiciatoria. Vidorreta no tardó en pedir tiempo muerto y pausar a sus muchachos, amén de introducir en la cancha a Richotti y Niang –fue baja por lesión Fran Vázquez–, cuya presencia dio nuevos bríos a los aurinegros.
Nuevos bríos alimentados por la falta de continuidad de los gasteiztarras. Sito Alonso quiso involucrar a sus hombres de banquillo en el ritmo de partido, pero la súbita entrada de estos –Luz, Tillie o Voigtmann– detuvo su caudal de juego. Si del 7-0 se pasaba al 11-5, de ahí se fue al 13-18, con las alarmas encendidas en Zurbano. Bargnani vivía minutos de oscuridad en los que alternaba errores en el tiro con una pelea sin cuartel con los árbitros. Mientras tanto, White, Abromaitis o Beirán ahondaban en las debilidades de los gasteiztarras.
Al descanso, el 30-32 que reflejaba el luminoso no era una bendición, pero sí un mal menor, con tantas intermitencias. Voigtmann y Larkin volvían a adelantar al Baskonia al arranque del segundo asalto, pero el juego gasteiztarra volvió a atrancarse. Tras una mala primera parte, jalonada con 9 pérdidas y un 3 de 11 en triples, el 30-32 era un fallo corregible.
El encuentro se adentró en una segunda mitad de vaivén, con continuos parciales de 0-9, 0-9, 8-0, 0-7... con una renta visitante máxima de 11 tantos: 39-50. Bargnani entró en juego al fin, anotando 11 de sus 13 puntos en el tercer cuarto. Pero en el cuarto asalto volvió a errar y a forzar tiros, mientras que Bogris le sacaba los colores en el bloqueo directo. Larkin, por falta de descanso de una rotación que se cortó en seco en el tramo final, también forzó más de la cuenta.
Con 68-67, Saski Baskonia tuvo varios balones para irse, pero erró, y entre Bogris y Carl English, ya en la recta final, ponían el 68-71. Acudió entonces Beaubois al rescate, volteando el marcador a solo seis segundos. Parecía que se repetía la historia que ante Tecnyconta Zaragoza, pero Beirán lo impidió con un palmeo que sonó a puñalada.
«Hay que ser más duros con nosotros mismos»
Se hizo de rogar un Sito Alonso que vive días muy complicados en el seno baskonista. El de Monzón reconocía que «debemos espabilar», y añadía que «hay que ser más duros con nosotros mismos».
«El equipo ha empezado bien, haciendo las cosas bastante bien también en defensa. Pero la clave está en la salida del tercer cuarto, donde hemos pecado de jugar muy blandos y ha permitido que se fueran. Cuando han cogido 11 puntos el equipo ha vuelto a ser agresivo, pero en los últimos minutos, cuando estábamos con ventaja no hemos sabido interpretar varias situaciones», incidía. «La jugada final de Beaubois quizás haya sido un pelín rápida, mientras que la canasta de Beirán llega por el punteo de tres jugadores al tiro ganador de White», terminó.
Cuestionado si el equipo está estancado, Sito Alonso lo achacó a que «parece que jugáramos un baloncesto más dinámico cuando teníamos bajas y ahora parece que pudiéramos reposar en la pista. Tenemos que ser más duros con nosotros mismos desde ya». A. G.

GARA es segundo en Gipuzkoa y NAIZ sigue creciendo con fuerza
Moreno y Lisci, dos trayectorias de menos a más en Osasuna

«Elektronika zuzenean eskaintzeko aukera izango dugu orain»

«Gizarte aldaketa handi bat» eskatu du euskararen komunitateak
