GARA
BILBO

Una empresa vasca fabrica un tejido capaz de pasar de flexible a rígido y viceversa

Varstiff es el nombre del «revolucionario» material desarrollado por Textia Solutions, con el apoyo de Tecnalia, que ayer fue presentado bajo el auspicio de EIDE, asociación de diseñadores de Hego Euskal Herria.

Sus impulsores afirman que Varstiff es «un material textil, ligero, flexible, que se vuelve rígido en pocos segundos, de precio reducido, totalmente reutilizable y que sus aplicaciones son casi infinitas en todo tipo de industrias». Como se puede observar en la demostración facilitada por Textia, este material tiene el aspecto de una tela totalmente flexible, a la que se puede moldear fácilmente y que, una vez adquirida la forma deseada, se pone rígida inmediatamente al ser sometida al vacío el interior de sus capas. Haciendo la operación inversa, vuelve a su estado inicial.

Concretamente, está fabricado con un laminado de capas, incluido en una bolsa plástica hermética que incluye una pequeña válvula de aire. Si se le quita el aire, el material adquiere una consistencia rígida equivalente a un plástico duro convencional. Como explicaron sus promotores, «se trata de un tejido ‘inteligente’ capaz de variar su dureza en función del vacío al que se somete».

Este nuevo producto ya está patentado y se encuentra en fase de producción y comercialización. Mañana mismo, EIDE –la asociación de diseñadores industriales, gráficos y de espacios– ofrecerá un taller para que sus asociados lo conozcan y lo testeen. Precisamente, en la sede de EIDE de Bilbo fue donde se llevó a cabo ayer la presentación, ya que la intención de sus impulsores es «involucrar a los diseñadores vascos en el proyecto con el fin de desarrollar nuevas aplicaciones y usos, y de ofrecer a medio plazo nuevos desarrollos de valor añadido gracias a este nuevo material».

En este proceso de innovación, que se ha prolongado durante los últimos cuatro años, también ha participado el centro de investigación Tecnalia.

Patente en el sector papelero

Por otro lado, un grupo de profesores e investigadores de la Escuela de Ingeniería de Gipuzkoa de la UPV-EHU han patentado un método para lograr compuestos de alto valor añadido a partir de los residuos de la industria papelera; concretamente, de la lignina que se obtiene en el proceso de trasformación de la madera en papel.

Tal como señaló el centro universitario, en un «futuro cercano» la lignina, además de sustituir a materiales plásticos, podrá ser utilizada «de diversas maneras» en la industria farmacéutica, agroquímica, alimenticia y cosmética, entre otras.

El sistema inventado por el equipo dirigido por Jalel Labidi «tiene una gran adaptabilidad industrial», pues el procedimiento es «fácilmente adaptable» a las instalaciones existentes en el entorno. Y ya está «completamente desarrollado para ser industrializado».