Raimundo Fitero
DE REOJO

Mediación

Lo único que de verdad merece la pena llamarse como alternativa política es “El Intermedio”, donde el Gran Wyoming se proclamó Wyoming I y dio un discurso memorable, parodiando al portavoz pepero cuñado de Urdangarin. Muy bueno, como casi toda su “equidistancia” aparente que es simplemente una postura coherente entre dos puntos lejanos, pero que se queda siempre más cerca de una mirada de izquierdas que de extremo centro. La Sexta, en general, con tanto tertuliano de la extrema derecha española, está aniquilando su virtual condición de alternativa .

La palabra de moda es mediación. Y como a los paneles de miel y a los montones de mierda acuden las moscas, hasta el Barça se ha propuesto como mediador. Los arzobispos de Barcelona y Madrid deben andar enredando. Algunos sindicatos también. Y se debe esperar alguna señal divina para que cese la actual españolización del relato, el enfrentamiento terco y propagandístico contra los catalanes con esperanzas de libertad de todas las fuerzas mediáticas, religiosas, policiales y políticas de toda índole. La movilización de la españolidad más reaccionaria, involucionista está activándose de manera acelerada. Y eso significa violencia constante. Barra libre para las acciones de defensa de la rojigualda.

En “Al Rojo Vivo”, hay dos tertulianos que son de “La Razón” ella y de “El Mundo” él, que aspiran a ser más cafres, más trogloditas, más violentos, mentirosos y manipuladores que Marhuenda e Inda. Él, lo está consiguiendo. Tiene mucho porvenir como asesor y relator de Interior. Para él no hubo exceso de celo en la cargas policiales. La violencia era la de los ciudadanos haciendo cola para votar. Le están dando cancha sospechosamente a  la denominada “Societat Civil Catalana”, la ultra derecha españolista en Catalunya. Y de mediación, nada. Rendición.