«Llevamos tres semanas sin competir y es difícil tanto para el jugador como para el equipo, y además, en un derbi da igual lo que diga la clasificación; siempre está fuera de contexto. Lo que importa es cómo juegas ese día». Son palabras de Daniel Clark, pívot de Delteco Gipuzkoa Basket, que retoma la Liga ACB visitando nada menos que el Bilbao Arena de Miribilla, ante un necesitado y muy renovado RETAbet Bilbao Basket.

«Bilbao Basket es un equipo diferente ahora que el de la primera vuelta, aunque no tanto», reflexionaba el jugador británico. «Han traído un par de interiores, un base, han cambiado de entrenador, pero sus principales armas siguen siendo las mismas. Siguen teniendo a Hervelle, Mumbrú o Gladness, que son pilares muy importantes de su equipo y que conocemos por muchos entrenadores y jugadores que cambien. Además, yo no los veo tan mal como lo que dice la tabla», advertía.

Con ocho victorias en 20 jornadas, Delteco Gipuzkoa Basket respira en la zona templada de la tabla. Lamentándose, eso sí, de la oportunidad perdida en su anterior partido, una derrota frente a Tecnyconta Zaragoza que, por un lado, sirvió para dar aire a un rival directo, y además enfatizaba el punto débil de los de Fisac, que es haber dejado escapar varios partidos en Illunbe.

Varios partidos, como pudo ser el derbi de la primera vuelta, en el que los hombres de negro se impusieron por 87-91, un resultado engañoso en cuanto que los bilbainos dominaron con cierta holgura durante más de medio partido, llegando a rozar la veintena de renta.

Con seis triunfos, Bilbao Basket tiene dos victorias de margen sobre el descenso, un margen que se puede ver estrechada si pierde, ya que Betis y Joventut se enfrentan entre sí. Miribilla se llenará este mediodía a las 12.30, pero también trasladará la presión al bando local, algo de lo que pudiera valerse GBC.

A este respecto, opinaba el capitán de GBC Xabi Oroz que «es posible que en un final igualado sientan presión, pero yo siempre preferiré jugar en casa con esa presión, porque también puede ayudarte para ganar en los minutos finales».

Un Bilbao Basket «nuevo»

Ahora habrá que ver a cuál de los dos equipos le ha sentado mejor el parón por la Copa y por las ventanas FIBA, y cuál ha preparado mejor el envite. Dice la lógica que los de Porfi Fisac, que además han recuperado justo a tiempo a Norel, tienen el juego mucho más automatizado, toda vez que no ha habido cambios en su plantel y que, salvo Clark, que regresó sin contratiempos, las ventanas FIBA no les han afectado. Por contra, las llegadas de Rebic y Bentil han revolucionado el seno de Bilbao Basket, con resultados aún por ver.

«Espero que podamos jugar mejor, pero lo cierto es que tenemos un equipo nuevo», reconocía Veljko Mrsic en la previa a este derbi. Amén de los dos recientes fichajes, Hammink, Todorovic o Redivo también han acudido con sus selecciones, de modo que al técnico croata no le han sobrado entrenamientos con el plantel al completo.

Respecto a Bentil y Rebic, Mrsic avisaba que «no podemos esperar grandes cosas en ataque por parte de ellos; todavía es pronto. Pero sí nos van a dar energía y juventud», al tiempo que Alex Mumbrú volverá a jugar de alero alto a tiempo completo, abandonando la idea de jugar como ala-pívot en su último año profesional. «Jugando con Alex de ‘tres’, ganaremos también en físico en el perímetro», explicó Mrsic.

El mencionado Mumbrú subrayaba que «ganar en casa es fundamental. Ojalá que los cambios se adapten cuanto antes y compitamos desde este mismo fin de semana».

Saski Baskonia apunta a la segunda plaza

A las 18.30, Saski Baskonia rinde visita a la cancha de un Tecnyconta Zaragoza que sale de este parón tras su triunfo en Donostia, pero que en el ínterin ha perdido al base Bo McCalebb por problemas familiares.

Los de Pedro Martínez llegan a Zaragoza apuntando a subirse al segundo lugar de la ACB –en posesión de Valencia Basket, pero que juega en Gran Canaria– con el «subidón» de haber derrotado con solvencia al Khimki, ofreciendo una imagen muy mejorada, sobre todo en lo que respecta a Huertas, uno de los jugadores más criticados a causa de un rendimiento más que irregular.

Lo cierto es que el cuadro maño tiene el principal peligro de Gary Neal, artífice del triunfo aragonés en el Buesa Arena en la primera vuelta por 73-78 –en el primer partido que dirigiera Pedro Martínez–. Pero al perder a McCalebb, se ha quedado con Carlos Alocén, que cumplió 17 años el 30 de diciembre, como único base puro, de modo que los gasteiztarras tienen un filón que debieran explotar para imponerse. A. G.