El madrileño Borja Bastón aterriza en Gasteiz para reivindicarse como jugador, con «ganas de ayudar», pero también de «demostrar mi nivel», lo que debiera redundar en «una temporada buena para todos nosotros». Fue presentado ayer como nuevo albiazul, lucirá el dorsal 18, y si algo reiteró en su comparecencia es que viene «con muchas ganas». Sus 18 goles en su temporada con el Eibar son una magnífica referencia. El delantero cedido por el Swansea galés está convencido de que el Alavés le viene como anillo al dedo, «creo que puedo encajar perfectamente para mostrar el mejor nivel de mí» y que le aporta la «confianza« que necesita. Y uno de esos ganchos, además de la presencia del ‘Pitu’ Abelardo, que el Glorioso tiene para que Bastón está aquí tiene que ver también con que «la afición del Alavés aprieta mucho y siempre están con los jugadores y apoyando al equipo».

El director deportivo alavesista, Sergio Fernández, destacó que «desde el minuto uno no dudó del nuevo proyecto. Viene a demostrar que es uno de los mejores delanteros de este país. Reúne todos los requisitos».