REAL SOCIEDAD 0

SEVILLA CLUB FÚTBOL 0

 

La Real encadenó su quinto partido en Anoeta sin ganar y el tercero sin marcar, para una racha de cinco jornadas de Liga en las que solo lo hizo en la victoria del derbi de San Mamés. El de ayer fue el mejor partido de esos cuatro en los que no ha encontrado la portería rival, pero en el fútbol los goles y las victorias son los que dan alegrías y además el juego fue plano, sin apenas jugadas de ataque que llevaran a los aficionados a esperanzarse con cantar un tanto.

Se tuvieron que conformar con cantar el nuevo himno y la Real pareció jugar a su ritmo. Más allá del debate que puede generar cambiar una palabra, lo peor es que parece una marcha fúnebre y se le da más importancia a esa palabra y al marketing que a lo realmente importante, que el primer equipo gane partidos. Y tras cuatro sin hacerlo en Anoeta es difícil tener una ocurrencia mayor que hacer salir al centro del campo a seis abonados que merecen otro tipo de homenaje por llevar más de 75 años en esa condición y tener a los jugadores diez minutos en el centro del campo tras una sesión de activación cantando ese himno. Eso no ayuda a que comience un partido como debe salir un equipo que necesita otra chispa, sobre todo de entrada, para poder marcar goles y cambiar la racha de Anoeta. Eso sí. algunos se quedarán tranquilos porque no sonó tras las críticas recibidas el “Txoria Txori” en la grada de Aitor Zabaleta, lo mejor del nuevo Anoeta.

El once de Vigo

Asier Garitano presentó un once muy similar al que empató el jueves en Vigo. Repitieron siete de los diez jugadores de campo, todos menos Illarramendi, Juanmi y Willian José, que además fueron los tres cambios en la Copa. De jugar con nueve canteranos en la última victoria de San Mamés pasaron a jugar cuatro en el once que se podía esperar cuando se confeccionó la plantilla en verano con Januzaj en la banda derecha y Oyarzabal en la media punta por vez primera esta temporada. Juanmi completó la línea de tres de un 4-2-3-1 en el que destacó que Aritz Elustondo siguiera en el lateral derecho con Diego Llorente y Héctor Moreno como centrales. De todos ellos fue el que menos se podía esperar, Januzaj, el que mostró otro ritmo distinto a sus compañeros. Casi todas las jugadas de ataque las protagonizó él, aunque en la mayoría buscó el remate sin una buena posición. Estuvo demasiado individualista, pero fue lo mejor del partido.

El Sevilla cambió a nueve de los once jugadores que alineó en la Copa ante el Villanovense. Solo repitieron Muriel porque Ben Yedder causó baja de última hora por unas molestias musculares y porque Amadou entró como tercer central para cubrir las bajas de Mercado y Kjaer.

Con distintos planteamientos los dos equipos asumieron muy pocos riesgos y jugaron un partido muy plano. En el primer tiempo apenas se pudieron contabilizar dos disparos de Januzaj fuera, un centro de Aritz Elustondo que no pudo cabecear bien Juanmi y una internada del beasaindarra en el área en la que no estuvo listo a la hora de buscar el contacto con el defensa que se tiró al suelo y el penalti. Una cosa es no tirarse y otra saltar para evitar el contacto.

Si la Real hizo poco el Sevilla menos. Apenas se pudo contabilizar un remate de Banega desde fuera del área que despejó Moyá y un intento de disparo que desbarató Héctor Moreno.

En la segunda mitad Garitano pasó a un 4-4-2 con Juanmi como segundo delantero en ataque, aunque con la misión de defender a Banega sin balón y Oyarzabal pasó a la banda izquierda para ayudar a Theo con el marcaje de Sarabia y Navas. El cambio de sistema no tuvo efectos en el juego, que siguió plano a la espera de las intervenciones en jugadas individuales de Januzaj. Garitano decidió dar entrada a Zurutuza en el centro y devolver a la izquierda a Juanmi hasta que fue sustituido por Sandro, que entró en la derecha y Januzaj pasó a la otra banda.

Zurutuza dio un pase magnífico al canario en la mejor opción realista, pero jugó tan pasado de revoluciones que se cayó y no llegó ni a rematar. Antes un tímido cabezazo de Willian José en el minuto 67 permitió contabilizar el primer balón enviado entre los tres palos rivales en los últimos dos partidos. Más claro fue uno de los remates de Januzaj, pero con ese ritmo y con tan pocas ocasiones hay incluso que dar por bueno el empate porque en los últimos minutos el Sevilla, que también se daba por satisfecho con el resultado, tuvo dos opciones a la contra en superioridad numérica tras saques de esquina realistas que hicieron temer incluso por la derrota. No hubiera sido justo porque ninguno de los dos hizo lo suficiente para poder ganar.

 

Garitano: «Hemos jugado bien contra un equipo muy bueno»

Asier Garitano trasmitió tras el empate que «hemos jugado un partido bastante bueno. El Sevilla tiene un equipo muy bueno y hemos tenido más cerca el 1-0 que el 0-1, aunque en los últimos minutos en cada corner nos han hecho contragolpes. Pero ha sido un partido bastante completo en el que nos ha faltado el gol y más acierto».

Sobre todo destacó el partido de Januzaj: «Ha estado mucho mejor de lo que pensábamos tras tres meses sin jugar, ha aguantado dos partidos seguidos y los 90 minutos, que no pensaba. Con el balón ha estado bien y sin balón mejor que el jueves. La idea es que se vaya metiendo, ahora queda un partido y luego parará. Estamos cada vez mejor, con él, con Willian José, Sandro y Juanmi, que llevaban tiempo sin jugar y han estado mejor e irán a más. Mientras tanto es una pena sacar solo un punto, pero sumamos y seguimos».

Se le preguntó por la ansiedad por buscar el gol y admitió que «los jugadores se precipitan para marcar, es un quiero y no puedo, es el quinto partido, pero si jugamos como en otros campos llegará la victoria. Hemos generado dos o tres situaciones bastante claras, pero cuesta cuando llevas cinco partidos en casa sin ganar. Hay ansiedad, precipitación y se necesita esa calma para hacer gol que no tenemos».

Por encima del encuentro Garitano destacó que «lo mejor de la tarde ha sido verle a Luca Sangalli en el vestuario».

Pablo Machín, entrenador del Sevilla, señaló que «el resultado refleja lo que se ha visto en el campo. Más allá de que hayamos intentado conseguir ese gol, nos hemos visto condicionados por buenas defensas y podemos dar el resultado como justo. Para nosotros mantener la portería a cero es meritorio porque, a parte de las bajas, no veníamos haciéndolo. Sabíamos que la Real no está acertada en casa y eso le iba a hacer más peligrosa. Ha sacado todo su arsenal ofensivo y lo hemos sabido contener. Al estar con la portería a cero, estamos cerca de la posibilidad de la victoria, pero no hemos tenido acierto ni hemos generado ocasiones como estamos acostumbrados». J.I.

Protagonistas

Moyá. Estuvo acertado en las pocas ocasiones en las que el Sevilla le puso a prueba.

Aritz Elustondo. Repitió en el lateral derecho como en Vigo y estuvo acertado en defensa y creó peligro en las pocas opciones en las que subió.

Diego Llorente. Bien, aunque acusó falta de ritmo en algunos duelos en las que se midió en velocidad con Promes.

Theo. También repitió y demostró que es un portento físicamente, pero no sacó partido a sus cualidades y tuvo lagunas defensivas que aprovechó Jesús Navas.

Illarramendi. Tanto él como Zubeldia estuvieron mejor en tareas defensivas que en ataque y eso refleja lo que es la Real en estos momentos.

Oyarzabal. Jugó la primera parte en la media punta, en la segunda en la izquierda y que sea el primer sustituido también es sintomático.

Januzaj. Fue el único que destacó en un partido plano, aunque se mostró excesivamente individualista.

 

Descanso antes de preparar la visita al Levante

La Real descansará hoy y mañana comenzará a preparar a las 17:00 en Zubieta a puerta abierta la visita del viernes a las 21:00 (Gol) al Levante. El miércoles y el jueves trabajará a las 10:30 a puerta cerrada. El Levante casi gana ayer en Villarreal (1-1). Pedraza lo evitó con un gol en el 93.

 

Renovado himno con homenaje a los más fieles

Felix Marquet, Ezequiel Olañeta, Jose Joaquín Arróniz, José Ignacio Salaberria, Ramón Sistiaga y José Juan Ramos, cinco abonados con al menos 75 años en esta condición, asistieron sentados desde el centro del campo junto a los jugadores de los primeros equipos de la Real al estreno del renovado himno.