El PNV reunió en la tarde de ayer a su dirección para confirmar lo que algunos de sus líderes ya habían avanzado en las entrevistas matinales: que buscará reeditar el pacto con el PSE porque su valoración sobre cómo ha ido el Gobierno con este partido «es buena, positiva, y es un acuerdo que tenemos en otras instituciones», según explicó la presidenta del BBB, Itxaso Atutxa.

La formación de Idoia Mendia también es favorable al acuerdo, aunque quiere hacerse valer en el proceso negociador. La Comisión Ejecutiva del PSE se reunió ayer por la tarde, y en un comunicado declaró que se siente «reforzada» por el electorado, que le situó «en una posición clave en la gobernabilidad de Euskadi, salvo que se concrete un pacto soberanista con una alianza PNV-EH Bildu», ante la que se colocaría en la «oposición».

Antes de ese encuentro, por la mañana, el secretario general del PSE de Gipuzkoa, Eneko Andueza, declaró en Radio Euskadi que «tendremos que ver cuál es el planteamiento que nos hace el PNV, lo tendríamos que analizar y analizar también cuál va a ser nuestro papel en ese Gobierno, nosotros queremos condicionar las políticas como lo hicimos en la pasada legislatura para que esas políticas no dejen a nadie atrás y cumplan unos objetivos concretos».

Pero por encima de Mendia y Andueza, la Ejecutiva Federal del PSOE, que se citó por la mañana para analizar los resultados electorales en Galiza y en la CAV, valoró positivamente que en esta comunidad se pueda reeditar el pacto con el PNV, que viene a «fortalecer» el Ejecutivo de coalición «que ya estaba gobernando».

Odón Elorza pide debate

Pero la idea expresada por la presidenta del BBB, Itxaso Atutxa, y también por Josu Erkoreka, de que el pacto con el PSE «ha ido bien», tiene alguna contestación en el partido del puño y de la rosa. El diputado Odón Elorza no duda de que «haya ido bien», pero cuestiona a quién le ha ido bien.

La misma noche electoral, a través de las redes sociales, lanzó el mensaje de «resultados que no cumplen las expectativas, aunque a otros les fue mucho peor». Y se preguntó: «¿se abrirá una reflexión en el PSE sobre la no continuidad en el gobierno de coalición con PNV?». Y apostilló que «la oposición puede ser constructiva, dialogante y estabilizadora en favor de políticas de izquierdas».

Ayer por la tarde insistió en que «mi objetivo, como secretario federal de participación, es que haya debate entre la militancia del PSE de cara a la decisión final».

Preguntado sobre estos mensajes, el secretario general del PSE de Gipuzkoa, Eneko Andueza, respondió que el PSE no entra en gobiernos «pensando en lo que le va a beneficiar como partido», sino en «beneficiar a la ciudadanía».

Y como si Odón Elorza no fuera de su misma organización, Andueza añadió que «entiendo que otros partidos tengan esa tendencia, pensar en qué rentabilidad política le pueden sacar a estar en un gobierno».

EH Bildu no se quedará quieta

La Mesa Política de EH Bildu se reunió por la mañana para analizar los excelentes resultados obtenidos en las elecciones, en las que subieron casi 25.000 votos mientras el resto de partidos perdía posiciones por la notable bajada de la participación.

En una comparecencia, la candidata a lehendakari, Maddalen Iriarte, y el coordinador general de la formación, Arnaldo Otegi, anunciaron que en los próximos días se pondrán en contacto con todas las fuerzas políticas, «salvo con las derechas españolas», con la intención de «explorar posibilidades» y configurar esas mayorías «soberanistas y progresistas».

Aseguraron haber entendido «el mensaje que hemos recibido por parte de la ciudadanía y tenemos que situarnos como la alternativa soberanista y progresista». Además de con partidos, señalaron que realizarán en los próximos días una ronda de contactos también con «agentes sindicales, sociales, económicos y feministas».

Ante un Parlamento con 59 escaños que defienden el derecho a decidir y donde hay 38 representantes (mayoría absoluta) que se definen de izquierdas, Maddalen Iriarte incidió en que es necesario hablar con las formaciones y los distintos sectores ya que «para articular una alternativa de izquierda y progresista es importante el trabajo de todos». Uno de los objetivos de las reunión será «hacer un diagnóstico de lo que ha pasado estas elecciones» y ver «cómo se puede conformar esa alternativa en los próximos años» y «los compromisos que cada uno esté dispuestos a adquirir».

Autocrítica de Podemos

Una de las coaliciones que salió peor parada de las elecciones del domingo fue Elkarrekin Podemos, que bajó de 11 a 6 escaños. La coordinadora autonómica de Podemos, Pilar Garrido, reconoció en Radio Euskadi que los resultados fueron «malos y no eran lo esperado», por lo que ve preciso «hacer, con tiempo y despacio, autocrítica para ver cuáles han sido los elementos que han llevado a perder la confianza de la ciudadanía».

En cuanto a las voces que pretenden hacer responsable de los malos números a Pablo Iglesias, Pilar Garrido rechazó que sea el culpable de la situación. «Yo diría que no. Si somos un proyecto colectivo lo somos para todo, para los éxitos y para los fracasos», afirmó la recien elegida coordinadora autonómica de Podemos.