Considerado como uno de los autores de novela negra más relevantes de la actualidad, Don Winslow es autor de la trilogía formada por “Cártel: El poder del perro”, “El cártel” y “La frontera”, títulos que se han convertido en referencia del thriller y la novela negra y que en breve serán adaptadas a la gran pantalla por Ridley Scott.

Ahora, su nueva novela, “Ciudad en llamas” –que saldrá a la venta el próximo 21 de setiembre– supone el arranque de una nueva trilogía. Ambientada en 1986, en Providence, estado de Rhode Island, “Ciudad en llamas” está protagonizada por un estibador que, ocasionalmente, presta sus músculos al sindicato del crimen irlandés que supervisa gran parte de la ciudad. Anhela algo más y, sobre todo, sueña con empezar de nuevo en algún lugar nuevo y lejano.

La irrupción de una joven, una especie de moderna Helena de Troya, desencadena una guerra entre facciones rivales de la mafia, y el protagonista se ve envuelto en un conflicto del que no puede escapar.

Esta es la base argumental de una novela que para Don Winslow es un proyecto muy especial. El autor reconoce que «ni me acuerdo la de veces que lo he empezado. Llevo décadas escribiendo este libro. Pero, al final de los noventa, me di cuenta de que mi educación era, cuando menos, estrecha de miras. En la universidad, por razones que realmente no son muy interesantes, me especialicé en historia militar de África, fuera del currículum habitual de artes liberales. Así que encontré una de esas listas de ‘libros imprescindibles’ y me pasé un año leyendo para, de manera autodidáctica, ensanchar mi formación».

En dicho proceso adquirieron especial relevancia los clásicos griegos y romanos y, según el autor, «encontré grandes paralelismos entre ‘La Ilíada’ y ‘La Eneida’ y las historias reales de la mafia con las que crecí. Conseguí leer el ‘Ulises’ de Joyce y me pregunté si sería capaz de hacer algo similar con la ficción criminal».

Clásicos y contemporáneos

Teniendo presente todo ello y observando a los personajes de los clásicos, el escritor estadounidense empezó a ver sus equivalentes contemporáneos. «Me obsesioné con la idea de volver a contar sus historias en una trilogía moderna. Vi el potencial que tenía Eneas, un personaje menor en ‘La Ilíada’, a través de los años, de sus andanzas y luchas, pero esta vez en un relato épico de mafia en Estados Unidos con Danny Ryan como protagonista», subraya.

Otro elemento destacado dentro del arranque de su nueva trilogía es el factor emocional. Para Winslow, “Ciudad en llamas” también representa un regreso a casa de alguna manera. Sobre ello explica que proviene «de un pueblo de pescadores similar al que es el escenario inicial de esta novela. Cuando me fui en los años setenta, mi hogar se había convertido en una ciudad de playa casi fantasma, como en una canción de Bruce Springsteen: las fábricas hacía tiempo que habían cerrado, la pesca se había agotado y el optimismo se había secado. Desde entonces se ha recuperado y hoy es un destino turístico de lo más próspero. Mi familia y yo hemos pasado cada vez más tiempo allí en los últimos veinte años y hemos visto los cambios».

Winslow admite, por tanto, que de cierta manera esta nueva novela simboliza un retorno a sus raíces. «Los escenarios más importantes de mis novelas han sido California o México. Puede que pensara que una vez que te has ido, te has ido. Pero, obviamente, eso no es verdad. Puede que Thomas Wolfe tenga razón, puede que no puedas volver nunca a tus orígenes», reflexiona.