El Ibex pudo recuperar ayer los 8.300 puntos, rompiendo una racha negativa de cuatro sesiones con pérdidas y un cierre plano. El nerviosismo sigue haciendo estragos entre los inversores, y ayer se tuvo una prueba más con la publicación del esperado dato del IPC de EEUU, que se se quedó por debajo del de marzo, pero tampoco llegó a culminar las expectativas de los mercados. En abril, la inflación llegó al 8,3%, frente al 8,5% anterior, pero se esperaba una caída hasta el 8,1%. También cedía la subyacente, que bajó del 6,5% al 6,2%, dos décimas por encima de lo previsto. Horas antes se había conocido la subida de una décima, hasta el 7,4%, del IPC alemán, su nivel más alto en cuarenta años.

Tras la aparición del dato del IPC estadounidense, las bolsas recortaron aceleradamente las subidas, hasta que se giraron al alza sin encontrar nuevos argumentos favorables para las compras. El Ibex se rearmó para poder superar los 8.300 puntos al cierre, perdidos el lunes por el azote bajista de Nueva York. Hoy comenzará con 8.312,60 puntos, tras anotarse un 2,13%. En Europa, las ganancias fueron también notables. París avanzó un 2,50%, Fráncfort, un 2,17%, Milán, un 2,84%, y Londres, un 1,44%. En Wall Street, a la hora del cierre en Europa, solo el Nasdaq 100 se movía a la baja, mientras que el Dow Jones y el S&P 500 registraban rebotes inferiores al 1%.

En el Ibex, solo Red Eléctrica (-0,08%) terminaba con pérdidas. Los valores más alcistas fueron Solaria (+7,44%) y Almirall (+6,69%). Además, se destacó Acerinox (+6,20%), después de anunciar un beneficio histórico de 266 millones en el primer trimestre del año, un 242% más que un año antes. Repsol (+4,47%) e Iberdrola (+3,03%) fueron los mejores entre los pesos pesados.