Ongi Etorri Errefuxiatuak y Mugak Zabalduz reclamaron ayer a las instituciones la apertura de corredores humanitarios para poder traer a Euskal Herria a entre 25 y 40 niños y niñas con graves enfermedades que en la actualidad se encuentran en los campos de refugiados de Grecia.

En una rueda de prensa ofrecida en Gasteiz, Arantxa Gutierrez y Agustín Gorbea alertaron de las pésimas condiciones higiénicas y sanitarias de los «campos de concentración» de Grecia, tal como revelan los informes hechos públicos por Médicos Sin Fronteras, que en 2020 cifró en 140 el número de menores con enfermedades graves que vivía en Moria.

Un año después, en junio de 2021, advirtió de que 120 niños se han autolesionado o intentado suicidar en las islas griegas, donde se hacinan miles de personas que, en palabras de Gorbea, «huyen de guerras que montan la OTAN y EEUU», en alusión a los conflictos de Siria, Irak o Afganistán.

Según explicó, el objetivo es poder realizar con garantías el viaje desde Grecia, «facilitando el tránsito por los distintos países de la UE hasta llegar a nuestra tierra; y una vez lleguen aquí, tengan las mismas condiciones de trato y asistencia que tienen las personas que vienen de Ucrania».

En este sentido, señaló que la guerra de Ucrania «ha abierto el corazón» de los mandatarios de la UE. No en vano, la invasión rusa propició que se activara el régimen de protección temporal, bloqueado desde 2001.

«Nos parece una decisión ajustada a Derecho y apoyamos que las personas que vienen solicitando asilo huyendo de la guerra de Ucrania sean recibidas dignamente por los diferentes países que componen la UE», aseveró antes de censurar que Bruselas «cierra la puerta» a otros refugiados.

«La UE les cierra las fronteras, les cierra el paso, les deja morir en los mares o externaliza las fronteras a países como Turquía, Libia o Marruecos, que no defienden los derechos humanos. [...] Son tratadas como desechos humanos, no como personas», añadió. Y denunció que se trata de una «política de muerte. Necropolítica». «Podemos decir que los mandatarios europeos están haciendo actos criminales. Son unos criminales en potencia», denunció.