GARA
JERUSALÉN
EL INCENDIO EN GAZA INCENDIA ORIENTE MEDIO

Israel viola otra vez los Acuerdos de Oslo con siete nuevos asentamientos

La ONG Peace Now denunció ayer la construcción de siete nuevos puestos de asentamientos israelíes en la Zona B de Cisjordania, que se encuentra bajo control de la Autoridad Palestina. Se trata de una acción sin precedentes y supone una nueva violación de los Acuerdos de Oslo, firmados hace 31 años.

Imagen de un puesto de asentamiento cerca de Nablus.
Imagen de un puesto de asentamiento cerca de Nablus. (Shadi JARAR'AH | EP)

Colonos israelíes han iniciado este año la instalación de siete puestos de asentamiento, conocidos como “puestos de avanzada” en la Zona B de Cisjordania, un área bajo control civil de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). Según denunció ayer la ONG israelí Peace Now, se trata de una acción ilegal y sin precedentes desde la firma en 1993 de los Acuerdos de Oslo, incumplidos en numerosas ocasiones por el Gobierno de Tel Aviv.

«Después de tomar el control de la Zona C y desplazar sistemáticamente a los palestinos mediante demoliciones de casas y violencia colona, los colonos ahora tienen la mira puesta en la Zona B», manifestó la organización, encargada de monitorizar las políticas de colonización.

«Los planes de anexión del Gobierno israelí no se limitan a la Zona C. Al permitir que los colonos establezcan puestos de avanzada en lo profundo de la Zona B, el Gobierno viola descaradamente otro elemento crítico de los Acuerdos de Oslo. Si no actuamos hoy, terminaremos de nuevo con un gobierno militar total en toda Cisjordania», añadió.

Cisjordania está dividida en tres zonas desde los Acuerdos de Oslo: la Zona A, bajo control militar y administrativo palestino y que supone un 18% del enclave palestino; la Zona B bajo control administrativo palestino, pero régimen militar israelí (22%) y la Zona C; controlada por Israel y que representa el otro 60%.

Peace Now explicó que los siete puestos de avanzada fueron habitados en el segundo semestre del año y, si bien uno de ellos próximo a la urbe palestina de Turmus Ayya, en Ramala, fue evacuado, poco después fue reconstruido por los colonos hebreos.

Cinco de ellos se establecieron en una zona denominada “Reserva Acordada”, un área próxima a Belén donde los palestinos tienen prohibido edificar. Mientras que los otros dos se ubicaron en el área de la gobernación de Ramala.

Al menos uno de los puestos de avanzada está habitado por una sola persona, otro por una familia y un tercero es el hogar de un grupo de jóvenes radicales colonos.

52 PUESTOS DE AVANZADA

En 2024 se batió el récord con la creación de 52 puestos de avanzada en toda la Cisjordania ocupada, ilegales tanto bajo la regulación israelí como en el Derecho Internacional. Los siete asentamientos localizados en la Zona B constituyen el 13,5% del total.

A lo largo de los años, gobiernos israelíes anteriores evitaron establecer asentamientos y puestos de avanzada en zonas bajo control de la Autoridad Palestina. Si bien hubo casos aislados en los que estos puestos se expandieron hacia los márgenes de la Zona B, estas expansiones fueron demolidas por la Administración Civil.

Hoy en día, casi no se aplican medidas contra los puestos de avanzada que se establecen en la Zona C, y a la vista está que el Gobierno de Netayahu, en el que participa la extrema derecha sionista, permite la construcción de nuevas colonias en la Zona B.

Y a esto se suman las incursiones militares israelíes en ciudades incluidas en la Zona A, como Hebrón o Nablus.

Así, no es de extrañar que 31 años después de los Acuerdos de Oslo, la parte palestina siga lamentando que no puede vivir con normalidad en su propia tierra. Además, en dichos acuerdos se obvió cualquier mención a los refugiados palestinos dispersos en otros países de la región.

La parte israelí ha incrementado su colonización en la Cisjordania ocupada, ha invadido Gaza, ha aumentado la judeización de Jerusalén y las comunicaciones entre localidades palestinas siguen estando bajo el control y la discrecionalidad israelí, con un Muro del Apartheid incluido.

ALTOS DEL GOLÁN

Israel también avanza su proceso de expansión por el norte. De hecho, la televisión siria alertó ayer de que las fuerzas israelíes habían entrado en la ciudad de Al Baaz, situada en la provincia de Quneitra, en los Altos del Golán. Una información sobre la que no se pronunció el Ejecutivo hebreo.

Las fuerzas israelíes continúan ocupando más territorio en los Altos del Golán, después de que esta semana penetraran varios kilómetros en la periferia de la provincia de Deraa, cerca de la frontera sirio-jordana. Y no duda en utilizar la fuerza contra quien se opone a su paso.

Basta con recordar que este pasado sábado el Ejército de Israel confirmó que una persona resultó herida durante una protesta organizada en la zona de Marbah, en el sur de Siria, para exigir la retirada de los soldados israelíes.

Las tropas del Ejército israelí invadieron el pasado 8 de diciembre, tras la caída del régimen de Bachar al Asad, la zona desmilitarizada de los Altos del Golán, ocupados en gran parte por Israel desde 1967. La incursión, que según las autoridades israelíes es temporal, ha sido criticada por algunos países árabes y por la ONU. Su secretario general, António Guterres, consideró que supone una nueva violación del acuerdo territorial entre Israel y Siria, que data de 1974.

Israel mantiene otros dos frentes en Líbano y Yemen, con el bombardeo de Saná el pasado jueves. El propio Benjamín Netanyahu aseguró este domingo en un vídeomensaje que su país atacará con «fuerza» a los hutíes, y dijo que para ello cuenta con el apoyo de otros países, en alusión a Estados Unidos. «Así como actuamos con fuerza contra los brazos terroristas del eje del mal de Irán, así actuaremos contra los hutíes. Solo que, en este caso, no estamos actuando solos», apuntó.



Ataque contra un hospital en Gaza

El Ministerio de Salud de Gaza denunció ayer que fuerzas israelíes ordenaron la pasada madrugada la evacuación del hospital Kamal Aduan, situado en el norte de la Franja y uno de los últimos centros médicos que quedan operativos.

El director general del Ministerio de Salud gazatí, Munir al Bursh, declaró a la agencia palestina Sanad que los militares israelíes lanzaron «un ataque integral» contra el hospital y exigieron «que los equipos evacúen de inmediato».

«Es inaceptable que el mundo permanezca en silencio y sea incapaz de proteger el sistema de salud. Estamos siendo atacados a plena vista, ante la mirada de todo el mundo, pero nadie interviene ante esta barbarie», lamentaron las autoridades médicas palestinas.

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, avisó de que las informaciones recibidas por los bombardeos israelíes contra el hospital, así como la orden de evacuación forzada, son «profundamente preocupantes», y recordó que «el hospital ha estado en medio de combates durante demasiado tiempo y las vidas de los pacientes están en peligro».

«Pedimos un alto el fuego inmediato en las inmediaciones del hospital y que se proteja a los pacientes y al personal sanitario», destacó. GARA