La superioridad del Real Madrid acaba con la racha azulgrana
Las blancas dominaron el juego y monopolizaron las ocasiones, que fueron numerosas. Feller, Linda Caicedo y Bruun acertaron para sentenciar.

El Eibar no pudo repetir la campanada de Valdebebas. Y eso que esta vez llegaba al encuentro en plena racha de victorias y con la tranquilidad de saberse salvado. Quizá fue eso lo que le restó un puntito de intensidad, lo justo para que el Real Madrid fuera dueño y señor del partido y solo Astralaga y los palos evitaran que la derrota fuera más rotunda.
Pese a la semana de descanso con la que celebraron su cuarta victoria consecutiva, las armeras tampoco afrontaban el choque en las mejores condiciones, con Amani tocada y Altonaga sancionada. Y pese a ello mantuvieron un rato a raya a un Real Madrid mandón y ambicioso.
Tras unos primeros escarceos sin demasiado peligro, Weir estrelló un balón en el palo mediado el primer tiempo y a partir de ese momento se sucedieron las ocasiones. Astralaga evitó el gol con dos intervenciones en la misma jugada ante Alba Redondo y Weir y después entorpeció el remate de Feller, que llegaba sola al área pequeña para rematar un servicio de Athenea. A cinco del descanso fue Linda Caicedo la que se estrelló con el buen momento de la vizcaina, justo antes de que Weir enviara el balón al larguero, y después fue Athenea la que vio cómo Astralaga le negaba también el gol.
Feller ha tenido más fortuna nada más volver de vestuarios. Medio gol se lo apuntó Yasmim, con una gran acción por banda izquierda, aunque el nombre lo puso la francesa, con un potente cabezazo en el segundo palo que colocaba el 0-1 en el marcador. Se desinfló un tanto el Eibar ante un rival inconformista, que volvió a encontrarse con la madera y Astralaga, antes de que Monnecchi, en el primer balón que tocaba, le encogiera el corazón con una jugada por banda izquierda que forzó la primera intervención de Misa.
Fue una gota de agua en el desierto blanco porque al Real Madrid se le pasó el desconcierto rápido y tampoco tardó mucho en ampliar distancias. Era Linda Caicedo la que se marchaba de Van Deursen y Mireia para batir a Astralaga. Después marcó Weir pero era su día y el tanto quedó bien invalidado por fuera de juego. En el descuento le sacó la espina Bruun, culminando un contragolpe para sentenciar.
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