Pedersen gana, arrebata la maglia rosa a Roglic y ambos se van contentos
Mads Pedersen tenía como objetivo de la tercera etapa del Giro recuperar la maglia rosa. Primoz Roglic buscaba perderla. Y ambos cumplieron sus objetivos en una etapa ganada por el danés en la que Pello Bilbao lo intentó en el último puerto.

Doblete de Mads Pedersen para despedir Albania. El Lidl-Trek controló la tercera etapa del Giro para que el danés se llevase su segundo triunfo parcial y, de paso, recuperase la maglia rosa que cedió en la crono de este sábado frente a Primoz Roglic. Dos por uno para un corredor que, visto lo visto, se puede ir de este Giro con un botín importante.
El ciclismo, más allá de la competición, es un evento de indudable reclamo turístico. Y las autoridades albanesas aprovecharon esta tercera y última etapa del Giro por sus tierras para enseñarlo. Las últimas dos horas de carrera transcurrieron por localidades cercanas a la costa adriática, plagadas de pequeñas subidas, hasta alcanzar la primera gran ascensión de esta edición de la Corsa Rosa.
Por delante viajaban Dries de Bondt, Lorenzo Germani, el ganador de la crono del sábado Joshua Tarling, Mark Donovan, Chris Hamilton y un habitual de estas fugas como Alessandro Tonelli. El perfil invitaba a pensar en que podía ser la primera oportunidad de que una fuga llegase a meta con éxito. Sin embargo, el Lidl-Trek tenía otro plan: buscar la etapa y recuperar la maglia rosa con Mads Pedersen. Los ciclistas parecían ser consciente de ello, ya que la fuga tampoco se peleó tanto como se acostumbra a hacer en estos casos.
El Red Bull de Primož Roglič dejó hacer, con el objetivo de ceder una maglia rosa que no solo obliga a trabajar al frente del pelotón, sino que reduce las horas de descanso de Roglic entre etapa y etapa. Los compañeros de Pedersen sostuvieron a los escapados durante todo el día, impidiendo que la diferencia se fuese más allá de los tres minutos.
El trabajo del Lidl acercó a la fuga al minuto a los pies de un puerto de 10 kilómetros al 7,5% de pendiente media y eso invitó a nuevos corredores a probarlo durante la subida a Qafa e Llogarasë. Entre ellos el vizcaino Pello Bilbao, que acompañó a un inspirado Lorenzo Fortunato en busca de la gloria. Ambos fueron cazando a los miembros de la fuga uno a uno. Hamilton y Tonelli fueron quienes más aguantaron junto a ellos, pero finalmente el italiano y el vasco se marcharon en solitario para coronar con una renta que rondaba los 50 segundos.
MOVIMIENTO DE BILBAO
El de Gernika ha corrido estas tres primeras etapas con un plan premeditado: dejarse tiempo en la primera jornada para tener libertad, tomarse la crono con calma y jugar sus cartas en la jornada de hoy, sabiendo que no inquieta a quienes vienen a jugarse la general final del Giro. Pedaleó siguiendo el guion, pero este domingo le faltaron tres o cuatro compañeros de fuga más que complicasen la persecución del pelotón. La escuadra de Lidl-Trek consiguió mantener a cuatro corredores en el pelotón escoltando a Pedersen, suficiente para acabar con las aspiraciones del dueto a unos 20 de meta.
Un pelotón reducido afrontó esos últimos kilómetros llanos en busca de un esprint en el que faltaban algunos de los mejores velocistas del pelotón, que no pudieron soportar el ritmo de la subida. En un momento se pudo ver al frente del grupo a Jonathan Castroviejo, el propio Bilbao y a Igor Arrieta protegiendo a sus respectivos líderes. Y es que el tramo final se las traía entre rotondas, calles estrechas y terrenos bacheados.
Estas carreteras estrechas desembocaron en una amplia avenida de un kilómetro que permitió una volata limpia, a pesar de la falta de un equipo dominante. Pedersen se agarró a la rueda de su compañero Mathias Vacek para lanzar el esprint a más de 250 metros. Un esfuerzo sostenido en el que el corredor del Israel Corbin Strong le complicó la victoria más de lo esperado, pero el danés pudo alzar los brazos, al igual que hiciese en la jornada inaugural. Por detrás de Strong, tercero, al igual que en la primera etapa, volvió a ser el venezolano de Movistar Orluis Aular, que está rentabilizando su presencia a base de puntos para la escuadra navarra.
Este lunes la carrera afronta su primer día de descanso. Más de traslado que de descanso como tal, para retomar el martes la carrera ya en territorio italiano con una etapa que finalizará en Lecce llamada a terminar, entonces sí, en un esprint masivo.

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