Una temporada «decepcionante» pero con perspectiva «optimista»
Sin eludir la autocrítica, el mánager general del Baskonia, Félix Fernández, lamentaba el «lastre» que les supuso el mal inicio liguero y apostaba por «ensanchar al equipo» con una «rotación útil» de más de 12 jugadores de cara a la próxima campaña.

Hay quien opina que a los desayunos de Saski Baskonia en los que se hace balance de la temporada, es mejor no ir, puesto que el club, a través de su mánager general Félix Fernández, presenta una imagen edulcorada. No obstante, y aunque no falte la ilusión de cara a la próxima campaña, la autocrítica estuvo presente ayer, así por la no clasificación del Baskonia ni para la Copa ni para siquiera el play-in de la Euroliga, o por la imagen ofrecida del equipo lejos del Buesa Arena. «El Baskonia no se lo puede permitir. Esto va de competir y ganar», constató Félix Fernández.
«Veníamos de que, por una vez, habíamos podido hacer pretemporada, pero el mal inicio nos ha lastrado. Noviembre fue terrible, con cinco derrotas en la Euroliga, y en la ACB ese mal momento nos condujo a no clasificarnos para la Copa, algo que no puede ser, porque el Baskonia tiene que estar ahí. Por momentos el equipo ha demostrado que talento y capacidad tenía. Es innegable que ha habido partidos buenos, pero ha habido demasiada irregularidad, sobre todo lejos de casa. Nos ha costado también poder ampliar la plantilla, al no conseguir que nuestros cupos tuvieran minutos en la Liga ACB, algo que nos estamos replanteando. La plantilla del año que viene tampoco escapará de las carencias, pero tenemos que ampliarla», añadió.
ESTILOS Y EGOÍSMOS
Un Fernández que no ocultó la «ilusión» generada con la llegada de Pablo Laso, cuya continuidad reafirmó, aunque ubicándola en esa «reflexión» luego de un año en el que el único objetivo, y de aquella manera, que logró Saski Baskonia fue volver a los play-offs de la Liga ACB. «En cuartos de final se ha competido bastante bien, pero esto va de ganar», insistió el mánager general del club.
«Este año ha habido muchos egoísmos; eso no es el Baskonia», dijo hace una semana el capitán Tadas Sedekerskis. Félix Fernández negó cualquier mal ambiente en el vestuario, e interpretó al ala-pívot lituano en el empleo de la palabra «egoísmos» como «la resolución en individual de los momentos malos, en aquellos malos partidos o derrotas dolorosas del club. ‘Esto lo arreglo yo’. A eso se refiere Tadas», matizó.
A pesar de la decepcionante temporada, resaltó que «todos los jugadores tienen mercado». Dentro del grupo protagónico, destacó la «evolución» de Trent Forrest, por más que su adaptación tuviera que ser forzosa por fichar a tres extracomunitarios al inicio de temporada y que su tendencia a retener el balón lastró el juego de Markus Howard. «Quiero que Forrest se quede. El año que viene jugará mejor», dijo.
Ensanchar el equipo, conjugar Euroliga y ACB y afrontar las «amenazas» de la NCAA y sus contratos NIL, la NBA y sus two way contracts y la ampliación de la Euroliga a 20 equipos, comprometen al propio Baskonia en la Euroliga.
«Tenemos que encontrar la viabilidad. El Baskonia siempre ha arriesgado», declaró. En ese sentido, y pese a la cantada marcha de Rogkavopoulos, las posibles llegadas de Clément Frisch, «Jugador Más Mejorado» de la Primera División Francesa, en Nancy, y el base Matteo Spagnolo, parecen formar las primeras piezas del Baskonia 2025/26.

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