ErNE dice que quienes dispararon no sabían que las pelotas podían matar
El portavoz del sindicato ErNE, Roberto Seijoó, culpó a quienes diseñaron el operativo de la muerte de Iñigo Cabacas y aseguró que los agentes actuaron cumpliendo órdenes y «sin tener conocimiento de que el uso de las escopetas con pelotas de goma podía ser letal».
Según el sindicato mayoritario en la Ertzaintza, ErNE, los agentes que durante treinta años han estado disparando pelotas de goma no saben que su empleo puede tener consecuencias mortales. Así lo dijo ayer su portavoz en relación a la muerte de Iñigo Cabacas en abril de 2012, en cuya instrucción se produjeron ayer las primeras declaraciones de imputados ante la juez del caso.
En declaraciones a Efe, el portavoz de ErNE, Roberto Seijoó, aseguró que los agentes que acudieron al callejón de María Díaz de Haro «lo hicieron en cumplimiento de una orden» de un superior jerárquico y «sin tener conocimiento de que el uso de las escopetas con pelotas de goma podía ser letal».
ErNE sostiene que la muerte de Iñigo Cabacas por el impacto de una pelota de goma tras un partido del Athletic fue «un trágico accidente» debido a una mala organización del operativo de seguridad de ese día y que, por tanto, no debe responsabilizarse penalmente a un ertzaina de lo ocurrido.
Culpa del Departamento
Afirmó Seijoó que «el único debate sobre lo que ocurrió aquella noche debe girar en torno al diseño del operativo» previsto por el Departamento de Interior para aquella noche de partido de fútbol entre el Athletic y el Schalke 04.
Según el portavoz sindical, mucho antes de aquel fatídico 5 de abril de 2012, «Erne ya había advertido que no estaba de acuerdo con los operativos de seguridad que se establecían ante eventos deportivos internacionales», en cuyo diseño primaba «el ahorro económico en gastos de personal» y por ello se convocaba «a un número insuficiente de agentes».
En consecuencia, prosiguió su explicación, «si ocurría algo, el ejercicio de la fuerza debía ser mayor», de manera que «la responsabilidad» de las consecuencias que pudiera tener corresponde al propio departamento del Gobierno de Lakua.
ErNE asegura que la actual Consejería de Seguridad ya ha corregido esta forma de actuar.
Además, Seijoó coincidió con el fiscal general, Juan Calparsoro, en que será muy difícil determinar qué agente fue el autor del disparo que mató a Iñigo Cabacas. A la dificultad natural de discernir cuál de los que dispararon hirió al joven, se añade el incumplimiento de los protocolos sobre el control del uso del material antidisturbios en la comisaría de Bilbo.
Un fallo informático borró la declaración de un agente y la Fiscalía hizo dos preguntas
Solo uno de los dos agentes citados en la mañana de ayer en el Juzgado de Instrucción número 10 de Bilbo para declarar como imputados en la muerte de Iñigo Cabacas pudo terminar su testimonio. En el caso del segundo, cuando se había producido ya una buena parte del interrogatorio, un fallo informático no solo bloqueó el ordenador en el que se estaban recogiendo sus palabras, sino que además borró todo lo declarado hasta el momento. Pese al trabajo de los técnicos, no fue posible recuperar lo perdido, así que este agente ha vuelto a ser citado para hoy.
En la causa por la muerte de Iñigo Cabacas no hay imputados más que cuatro ertzainas, que son los tres únicos agentes que reconocieron en las declaraciones en comisaría haber disparado pelotas de goma y el suboficial que estaba al mando de esa furgoneta. El agente 10.216 declaró ayer y respondió a todas las preguntas que le efectuaron cada una de las partes. El ertzaina 11.066 deberá volver hoy para repetir y finalizar su declaración, y le seguirán el número 15.248 y el suboficial 5.351.
La novedad de la diligencia judicial practicada ayer fue la aparición de la fiscal encargada del caso, después de que la acusación particular que representa a la familia Cabacas hubiera criticado recientemente en público que el fiscal superior, Juan Calparsoro, se permitía hacer declaraciones sobre esta causa cuando el Ministerio Público no estaba participando en ninguna diligencia; tampoco en la declaración de un testigo que tuvo lugar la pasada semana. Según datos recabados por este diario, durante las horas de interrogatorio que se desarrollaron ayer, la fiscal hizo solo dos preguntas.
La defensa de los cuatro imputados corre a cargo del mismo bufete de abogados que defendió a Rodolfo Ares en el juicio por las conversaciones con Arnaldo Otegi y otros líderes de la izquierda abertzale. Se trata de un despacho que trabaja, entre otros casos, en los litigios en los que se ven afectados dirigentes del PSE.
El pago de la defensa de los ertzainas corre a cargo del Gobierno de Lakua, una prerrogativa que les otorga la Ley de Policía. Según el Departamento de Seguridad, la Administración dispone de un seguro que se hace cargo de las minutas. Iñaki IRIONDO
Fallecidos
Jose Luis Aristizabal
Fallece en Donostia el 14 de marzo de 1977 tras recibir un pelotazo en la cabeza mientras circulaba dentro de un coche.
Isidro Susperregi
Muere, también en Donostia, el 30 de marzo de 1977, quince días después de haber recibido un pelotazo.
Rosa Zarra
Murió en Donostia, en junio de 1996, una semana después de recibir un pelotazo en el vientre. La causa oficial se atribuyó a una infección generalizada.
Otros casos
Hay documentadas otras cuatro muertes en Cartagena, Parla, Barcelona y Valencia, todas ellas entre 1977 y 1979. En Euskal Herria hay casos de pérdidas de ojos y de testículos.
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