La prensa española dedicaba ayer portadas y abundantes páginas al Debate sobre el estado de la Nación. Como siempre, estaba clarísimo quién había ganado el enfrentamiento entre Rajoy y Rubalcaba -que parecen ser son los únicos que cuentan-, según el medio que lo contaba, claro.

«Abc» titulaba en primera «Rajoy descoloca a Rubalcaba con una gran rebaja de las cotizaciones» y, según aseguraba en el titular de su editorial, «Rajoy da a España la esperanza que Rubalcaba le quita». Qué tristeza, el futuro de tantos millones de personas en manos de uno o de otro. Hablando de futuro, el vetusto diario nos explicaba la victoria de Rajoy en el Congreso español: «El Debate sobre el estado de la Nación puso a cada cual en su sitio; y lo ganó Rajoy porque logró representar la confianza prudente por el futuro de España». Para decir esa melonada, mejor lo dejaba en que ganó Rajoy porque sí, ¿no creen?

«La Razón» era más contundente, empezando por su portada: «La ambición Rajoy derrota al apocalipsis de Rubalcaba», y en su editorial aseguraba que se imponen las razones de Rajoy porque «El presidente argumenta la incuestionable mejora del país frente al discurso catastrofista de Rubalcaba». Pues servidora, lo mismo que casi toda la gente con la que habla, no ve esa «incuestionable mejora» por ningún lado, y sí la necesidad de Rajoy de vender la «recuperación» ante la proximidad de unas elecciones. En el mismo diario, tras una columna de Francisco Marhuenda dedicada a su habitual y grimoso peloteo, Iñaki Zaragüeta perpetraba la suya asegurando que Rajoy «demostró sensibilidad hacia los problemas de los españoles. Uno de ellos, el segundo en importancia, es la corrupción». Se refería a que el presidente del Gobierno español «tendió la mano al resto de los grupos para encontrar instrumentos penales y procesales para combatir esa lacra». Y, como seguramente presume que todas las personas que le leen son estúpidas, decía que esa propuesta «no puede caer en saco roto». Ya, el partido más corrupto va a combatir la corrupción. Anda, majo.

También Federico Jiménez Losantos, en «El Mundo», decía que el debate «lo ganó ayer Rajoy cuando le dijo a Durán lo mismo que Rosa Díez en su moción contra Mas: que no privará a todos los españoles del derecho a decidir sobre el futuro de España. Y lo perderá Rubalcaba mientras vaya de la mano de la ETA a verificar navarra y entregársela». Parece que sigue sin caerle bien el presidente.