Una apuesta por el espectáculo
ASO se acerca a la línea de Giro y Vuelta y coloca nueve finales en alto, una etapa de pavés, una crono por equipos y solo 14 kilómetros de lucha individual para satisfacción de los escaladores. Chris Froome, contrariado, deja entrever su disposición a correr Giro y Vuelta.
A pesar de que se habían filtrado muchas de las líneas maestras del recorrido, ASO sorprendió al presentar ayer en el Palacio de Congresos de París un Tour completamente diferente a lo que ha sido habitual en los últimos años, con una apuesta clara por un trazado espectacular más propio del Giro y de la Vuelta.
Hasta nueve finales en alto, seis en etapas de alta montaña, presenta un recorrido que solo tiene 14 kilómetros de contrarreloj individual el primer día y una crono por equipos de 28 en el noveno. Además en el cuarto se superarán más de trece kilómetros de pavés al llegar a la conclusión de que, tras lo sucedido en la última edición, prima el espectáculo a pesar de las críticas de los que temen que en un día se acabe la carrera para algunos de los favoritos.
El recorrido favorece claramente a los escaladores, porque ya para la primera semana tienen dos llegadas en los muros de Huy y de Bretagne. Luego en los Pirineos esperan tres finales en alto seguidos en la Pierre de Saint Martin, Cauterets, aunque no se sube hasta arriba tras subirse el Tourmalet desde Saint Marie de Campan, y Plateau de Beille. Se atraviesa el Macizo Central con el final de Mende y para la última semana quedan cuatro etapas alpinas. Tres con final en alto en Pra Loup, La Toussiere tras subir la Cruz de Hierro y Mollard y Alpe d'Huez tras ascender el Galibier y una cuarta con final en Saint Jean de Maurienne tras subir el Glandon.
El Tour tendrá una etapa en Euskal Herria el martes 14 de julio con 167 kilómetros, salida en Tarbes, paso por Maule y ascensión al exigente Soudet desde Arette para acabar en la Pierre de San Martín. Será el primer puerto importante de los 26 pasos de Segunda, Primera o Fuera de Categoría que presenta el recorrido, siete en Pirineos, tres en el Macizo Central y 16 en los Alpes.
La reacción de Froome
El recorrido no gustó al ganador de 2013, Chris Froome, que dijo que «es montañoso y la contrarreloj tendrá poca importancia. Soy un ciclista de grandes vueltas equilibradas y el Giro, con su larga crono de 60 kilómetros, será muy equilibrado y se adapta bien a mis características y en la Vuelta podría buscar también la victoria. Hasta ahora me he concentrado en una gran vuelta por año, pero puede ser una buena opción de perseguir dos, aunque es pronto para decidir».
Satisfacción de Nibali, Contador, Unzue y Nairo Quintana
Si Froome, que no fue a la presentación, mostró su contrariedad con el recorrido a través de internet, los demás favoritos mostraron su satisfacción, sobre todo Nibali, que agradeció que además de los nueve finales en alto se vuelva a pasar el pavés: «Me viene bien, me recuerda al Tour de este año, con una primera semana muy complicada. Me gusta que vuelva a estar el pavés, aunque sigo sin ser un especialista. No soy un ciclista de la Roubaix, este año puede ser distinto».
Achacó que los organizadores hayan reducido el número de kilómetros contrarreloj a su deseo de aventajar a Thibaut Pinot y tanto él como su manager Alexander Vinokourov rechazaron que los casos de positivo de los Iglinsky y del ciclista del Astana continental Davidenok ponga en peligro que pueda defender su triunfo de 2014.
Alberto Contador, que ha anunciado que disputará el Tour tras correr el Giro, señaló que «es un recorrido que me gusta. Es más duro que los últimos años y me exigirá recuperar bien tras el Giro, pero lo voy a preparar a tope. Hay que llegar en un buen estado de forma porque empieza con una contrarreloj en la que se harán diferencias y hay que llegar fresco al final exigente».
El director del equipo Movistar, Eusebio Unzue, señaló que «es un Tour netamente para escaladores. No recuerdo uno con tan pocos kilómetros de contrarreloj, apenas catorce, más los de la crono por equipos, que va a convertirse en importante. Puede ser una carrera espectacular. Para nosotros parece un Tour muy atractivo en el que de inicio habrá que plantearse un objetivo: llegar sanos y salvos a Pau. Si lo conseguimos, puede ser un Tour muy interesante para nosotros».
Su líder en el Tour sería Nairo Quintana, que señaló que «es un recorrido muy bueno para mí. Hay pocos kilómetros contrarreloj, mucha montaña y lo único preocupante puede ser la etapa del pavé. Es un día en el que, como vimos este año, hay que tener cuidado porque no se va a ganar el Tour, pero puedes perderlo. Hay que tenerlo muy en cuenta y analizar bien la etapa porque, sobre todo, los dos últimos tramos son largos. Con tantos finales en alto, el trazado me favorece y, aunque aún hay que decidir mi calendario, seguramente me prepararé con todo para tratar de luchar por el triunfo. Son puertos que me van muy bien, la crono no es muy larga y la contrarreloj por equipos no me preocupa». GARA
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