La directora del Departamento de Atención y Prevención de Desastres de Antioquia (DAPARD) organismo, María Inés Cardona, ha detallado, en declaraciones a la emisora colombiana Caracol Radio, que de los 62 cadáveres se han enviado 37 a Medellín, donde siete equipos de profesionales se encargarán de llevar a cabo las labores de identificación.

Horas antes, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, declaraba zona de calamidad pública la región afectada por la riada y reconocía que no saben cuántas personas siguen desaparecidas, por lo que las autoridades temen que la cifra de fallecidos pueda aumentar según pasen las horas.

Tras sobrevolar la zona del desastre y reunirse con las autoridades locales, el mandatario colombiano mostró su solidaridad con las personas afectadas por esta tragedia y anunció un paquete de ayudas para la reconstrucción de viviendas, subsidios al alquiler y otros apoyos de urgencia.

Asimismo, aseguró que desde el puesto de mando unificado continuarán las labores de búsqueda de las personas desaparecidas, indicando que hay «por lo menos 166 personas de distintas entidades» participando en estas tareas.

Los cadáveres están siendo trasladados a Medellín para su identificación, ya que en el municipio de Salgar (noroeste) no hay condiciones técnicas para esos procedimientos. Posteriormente, en la medida que las familias lo pidan, serán enviados de nuevo al municipio para ser enterrados.

En la zona, los equipos de rescate también distribuyen agua potable entre los habitantes de la zona, donde los servicios de gas y electricidad han sido suspendidos para evitar males mayores. Asimismo, está prevista la entrega de unos 500 kits de ayuda humanitaria para la población afectada.

«Nadie nos va a devolver a los muertos, lo cual lamentamos profundamente y acompañamos a las familias, pero tenemos que salir de este desastre y mirar hacia adelante con valor y con firmeza», sentenció Santos.

La tragedia ocurrió la madrugada del lunes por el desbordamiento de la quebrada Liboriana a causa de las lluvias, lo que ocasionó una avalancha que prácticamente arrasó el corregimiento de Las Margaritas y afectó a tres barrios del perímetro urbano de Salgar.